La banca solicita que Abengoa use a Yield de garantía
Las entidades financieras que pilotan junto a KPMG las negociaciones con Abengoa –Santander, Bankia, CaixaBank, Popular, Sabadell, HSBC y Crédit Agricole– están barajando conceder una inyección de dinero en efectivo a corto plazo para la compañía. Eso sí, el cash se entregará con condiciones.
El pasado viernes, el grupo de ingeniería se reunió con la banca y puso sobre la mesa un plan de viabilidad y unas necesidades de financiación de 100 millones hasta final de año y otros 350 millones para el primer trimestre de 2016, que coincidirían con la finalización del periodo de preconcurso, según fuentes conocedoras del encuentro.
La banca tiene que estudiar la propuesta y previsiblemente realizará una contraoferta a la baja. La buena noticia para Abengoa es que las entidades son conscientes de que no inyectar dinero ahora sería matar de inanición a la multinacional. “No hay dinero para pagar la extra de la Navidad”, aseguran fuentes conocedoras de la situación de la firma.
Acreedores y empresa pusieron encima de la mesa la posibilidad de capitalizar una parte de la deuda, como publicó CincoDías el viernes. Abengoa, hasta ahora, se había cerrado por completo a esta posibilidad. Sería una de las mejores soluciones para el futuro de la firma.
Como contrapartida, la banca exigirá garantías para entregar ese dinero de emergencia. Y entre los activos de Abengoa, el más atractivo para ejercer como prenda es Abengoa Yield, la filial cotizada en Estados Unidos de la compañía sevillana, y de la que su matriz controla un 47% del capital, porcentaje valorado en más de 600 millones de euros. En su salida a Bolsa en junio de 2014 Abengoa controlaba el 64% de Yield, pero ha ido haciendo caja en los últimos meses. Abengoa, de hecho, ha contratado a JPMorgan para que le ayude a encontrar a un socio que compre toda su participación.
La participación en Abengoa Yield es la opción preferida por las entidades financieras, pues está en forma de acciones cotizadas y además agrupa activos de gran calidad. Pero no es la única opción encima del tapete. Existe margen para que Abengoa pueda presentar algún otro tipo de colateral que sirva como contrapartida de la liquidez de urgencia. La banca tendrá prioridad, en cualquier caso, a la hora de recuperar el dinero en caso de que se produzca el peor escenario para la empresa.
No es la primera vez que Abengoa recibe liquidez a cambio de pignorar acciones de su filial más valiosa. Ya lo ha hecho dos veces desde junio para recibir financiación puente para desarrollar sus proyectos. El fondo The Children’s Investment (TCI), que tiene en España una participación del 7,7% en Aena, dio a finales de octubre un respiro financiero a Abengoa –que por entonces intentaba aún cerrar la ampliación de capital de 650 millones– con la concesión de un crédito de 130 millones de dólares, unos 118 millones de euros a dos años.
El préstamo –un crédito puente con el que la empresa sevillana financia sus proyectos durante a la fase de construcción, se realizó a través de la sociedad Talos Capital, y tiene como garantía un paquete de 14,22 millones de acciones de Abengoa Yield, un 14% de su capital. Este porcentaje ha pasado de estar valorado en unos 230 millones de euros a finales de octubre a alrededor de 190 millones tras la depreciación de la acción de Abengoa Yield de las últimas sesiones tras la solicitud de preconcurso de acreedores. En el año, la filial de Abengoa cae un 45%.
De no devolverse a su debido tiempo, TCI podría ejecutar la garantía y se quedaría con ese 14% de la filial cotizada de Abengoa, lo que reduciría la participación actual de la matriz hasta el 33%. El préstamo de TCI sustituyó a uno anterior de Bank of America, firmado a finales de junio y de un importe de 200 millones de dólares, que tenía como prenda 14 millones de títulos de Abengoa Yield.
Abengoa tiene un pasivo de más de 20.000 millones de euros, según las estimaciones preliminares. Está previsto que KPMG entregue un informe de la deuda real de la compañía a finales de esta semana.