Internet, gran aliado del pequeño comercio
Los minoristas de ambos lados de la 'raya' buscan la recuperación del consumo más allá de sus fronteras

La caída del consumo fue una de las consecuencias de la crisis económica que más acusaron las empresas españolas y portuguesas. El comercio minorista, uno de los ámbitos más castigados, parece empezar a ver la luz al final del túnel debido a la tímida recuperación, pero sobre todo gracias a las exportaciones y la internacionalización, convertidas en tabla de salvación para muchas compañías.
Este impulso ha llegado de la mano, en múltiples casos, de internet. “Son muchos los portugueses que, gracias a su conocimiento del castellano, compran a través de la red en tiendas españolas”, explicó en el Foro Ibérico Empresarial Leonard Pera, director general de la empresa especializada en comercio electrónico Open Ideas, en relación al aumento de las relaciones entre negocios de un lado y otro de la frontera.
Conocedor de las posibilidades del mundo digital, Pera señaló que este ofrece, especialmente a las pequeñas y medianas empresas, un mundo de oportunidades que todavía muchas no han aprovechado por “desconocimiento y falta de estrategia”.
El contacto cada vez mayor que existe entre las compañías de un lado y otro de la frontera, juega también a favor de los comerciantes de pequeño tamaño. Un ejemplo lo constituyen los servicios de logística, que cada vez con más frecuencia ofrecen una tarifa única para los envíos a toda la Península Ibérica.
Para Carlos Ruiz, director de Imago Llorente&Cuenca, el reto del contacto entre España y Portugal se encuentra en las pymes, puesto que prácticamente todas las grandes cuentan ya con presencia tanto en Lisboa como en Madrid. Sin embargo, la transformación que están viviendo ambas economías parece invitar al optimismo. “Hoy en día las compañías nacen con un ADN exportador”, asegura Filipe Nogueira, director sénior de la misma consultora de comunicación.
Para Extremadura, con un tejido empresarial compuesto principalmente por pymes, la cercanía de un mercado extranjero como es el portugués, con cerca de 10,5 millones de habitantes y unos hábitos de consumo similares a los españoles, representa un importante nicho en el que hacerse un hueco. El ejecutivo regional calcula que las ventas entre esta zona y el país luso podrían superar el año que viene la cifra histórica de 1.000 millones de euros (en 2013 se alcanzaron los 920 millones).
Sectores como la agricultura y la siderurgia siguen teniendo un gran peso en esas relaciones, pero son todavía muchos los bienes y servicios que las corporaciones, sea cuál sea su tamaño, pueden introducir allí con la planificación adecuada.