Hacienda rechaza tomar más medidas de ajuste pese a la caída de los ingresos fiscales
Currás niega un aumento del IVA este año y argumenta que la ayuda financiera a las comunidades tendrá contrapartidas
Los ingresos tributarios cayeron un 3,3% en el primer cuatrimestre del año, un mal dato que, sin embargo no inquieta (todavía) al Ministerio de Hacienda. La secretaria de Estado de Presupuestos, Marta Fernández Currás, restó importancia a este descenso y defendió que el efecto de las subidas fiscales aprobadas todavía no se refleja plenamente. Además, argumentó que el Gobierno ha adelantado las devoluciones de impuestos a empresas y familias. En cualquier caso, el déficit del Estado hasta abril alcanzó los 25.462 millones frente a los 16.821 millones del mismo periodo del año anterior. Supone el 2,39% del PIB. Sin embargo, en términos homogéneos, Hacienda asegura que los números rojos se reducen hasta el 1,43% del PIB, 1.000 millones menos que la cifra registrada el ejercicio anterior.
Currás aseguró que la Administración central está adelantando dinero para garantizar la liquidez de las comunidades autónomas, entes locales y Seguridad Social, una circunstancia que perjudica el déficit del Estado, pero que a lo largo del año se difuminará. "No debemos estar preocupados por la evolución del déficit", aseguró Currás. De hecho, las mayores dudas de cumplimiento del objetivo de estabilidad se centran en las comunidades autónomas, muchas de las cuales ya han reconocido en privado, y algunas en público, que tendrán problemas para refinanciar sus vencimientos de deuda. El Consejo de Ministros aprobará este viernes una suerte de hispabonos, lo que supone que el Tesoro auxiliará financieramente a las regiones. Actualmente, algunas comunidades tienen los mercados de crédito cerrados o se ven obligadas a pagar intereses muy superiores a la Administración central. Con los hispabonos se reducirá el coste financiero para las comunidades autónomas. En cualquier caso, ello no será gratis. La secretaria de Estado de Presupuestos señaló que las comunidades que precisen el auxilio financiero del Estado deberán aceptar una mayor supervisión del Gobierno, dar más información y presentar medidas de ajuste adicionales. Cataluña es la región que precisa con mayor urgencia de la ayuda del Tesoro. Este año afronta vencimientos por casi 14.000 millones de euros.
Recaudación por IRPF
En cualquier caso, los hispabonos es una tema que está llevando el ministro de Economía, Luis de Guindos, mientras que en Hacienda su principal preocupación es cumplir el objetivo de estabilidad. En este sentido, la evolución de la recaudación refleja la mala situación económica. Especialmente drástica es la caída de los ingresos por IVA, que retroceden un 8,2% hasta abril. Suman 20.969 millones. El descenso se explica por la fuerte caída del pago de las pymes y, en menor cuantía, de las grandes empresas. Currás señaló que estos números confirman que hubiera resultado contraproducente elevar el IVA este año. En principio, el Gobierno se plantea aumentar el principal impuesto indirecto en 2013 y Currás aseguró que Hacienda rechaza adelantar esta medida. Las cifras hasta abril sugieren que la caída de ingresos de IVA podría resultar superior al descenso del 3,3% previsto en los Presupuestos.
El Ejecutivo, en lugar de elevar el IVA, optó por incrementar el IRPF, una medida que, de momento, no se traduce en un incremento de la recaudación debido a que el efecto de la subida todavía no ha completado su recorrido. Con todo, la menor renta de los hogares y el descenso de las retenciones del trabajo -provocado por el incremento del paro- presionan a la baja el principal impuesto por recaudación.
De hecho, el único tributo que mejora es el impuesto sobre sociedades, cuya recaudación alcanzó los 3.730 millones hasta abril, un 2,6% más. Esta cifra ya es significativa al reflejar el pago fraccionado del primer trimestre. En cualquier caso, los mayores ingresos se explican exclusivamente por el incremento fiscal que aprobó el verano pasado el anterior Gobierno para las grandes empresas y que, durante este ejercicio, se ha traducido en 823 millones. Por otra parte, el Ejecutivo de Rajoy también ha aprobado un recorte notable de los beneficios fiscales, lo que debería permitir que la recaudación por este tributo aumentara un 17,8% en el conjunto del año. Respecto a los impuestos especiales, los ingresos retrocedieron hasta abril apenas un 0,4%. Sin embargo, supone un dato engañoso, ya que en abril se registró un notable aumento del impuesto sobre el tabaco por las mayores ventas de cajetillas en los días previos a la subida fiscal aprobada por el Gobierno. Si bien la recaudación de impuestos cayó un 3,3%, el total de ingresos no financieros aumentó ligeramente por la buena evolución del capítulo de tasas y precios públicos.
Por otro lado, la Administración central gastó hasta abril 54.931 millones, un 10,3% más que el periodo anterior. En cualquier caso, Currás advirtió que este incremento se explica por el adelanto de transferencias a otras Administraciones por un importe superior a los 8.000 millones. El avance de liquidez no supondrá un mayor déficit al finalizar el año. Sin embargo, del informe de ejecución destaca el fuerte incremento del capítulo dedicado a pagar los intereses de la deuda, que hasta abril aumentó un 31,5%. Currás no negó que el mecanismo de rescate de Bankia o la puesta en marcha de los hispabonos podría elevar los gastos financieros que sí afectan al déficit público.
Además de las autonomías, la Seguridad Social es la otra Administración que sale beneficiada por el adelanto de las transferencias del Estado central. Gracias a ellas, registró un superávit de 7.500 millones, un 9,4% más que en el mismo periodo de 2011. Sin el avance de liquidez, que asciende a 2.288 millones, la Seguridad Social todavía mantendría un superávit del 5.212 millones, una cifra muy inferior a la del año anterior. El secretario de Estado de la Seguridad Social, Tomás Burgos, señaló que para que el sistema "disponga en todo momento de recursos suficientes" se han modificado los calendarios de las transferencias del Estado. "Resulta esencial para despejar cualquier incertidumbre", concluyó.
El adelanto de liquidez a comunidades y Seguridad Social penaliza la evolución del déficit del Estado central hasta el primer cuatrimestre
Llámenlo hispabonos o como quieran
Cuesta encontrar un punto en el que exista unanimidad de todas las comunidades. Sin embargo, todas piden -algunas suplican- la puesta en marcha de un mecanismo para que el Tesoro avale deuda autonómica. "Da igual que sean hispabonos u otra fórmula", señala el consejero de Economía valenciano, Máximo Buch. La Comunidad Valenciana es, por detrás de Cataluña, el territorio con un calendario de vencimientos de deuda más difícil que, de hecho, ya precisó de la ayuda del Estado.Las comunidades deben afrontar vencimientos de deuda por casi 36.000 millones este año. Y todo ello, en un momento en que la prima de riesgo se encuentra en niveles récords. Además, los mercados desconfían del cumplimiento del objetivo de déficit autonómico. Todo ello provoca que para los Gobiernos regionales resulte simplemente imposible acceder al crédito. La única solución pasa por la intervención del Tesoro. En cualquier caso, Hacienda recuerda que no permitirán que las comunidades más saneadas compartan el riesgo de aquellas con mayores números rojos.En este sentido, la comisión delegada de mañana estudiará la puesta en marcha de los hispabonos y las contrapartidas que exigirá a las comunidades autónomas. En cualquier caso, el Ministerio de Hacienda niega la posibilidad de exigir que se reduzca este año el déficit a un nivel inferior del 1,5% que establece el objetivo de estabilidad. Ello tiene lógica ya que, aunque se pidiera, resultaría imposible cumplirlo.