Reino Unido seguirá adelante con su plan de recortes sociales
El Gobierno británico ha prometido hoy continuar con su polémico programa de reforma y reducción de las prestaciones sociales en el Reino Unido pese a la derrota sufrida ayer en una votación en la Cámara de los Lores.
La Cámara de los Lores votó una enmienda que pedía excluir del proyecto de ley de reforma de las prestaciones sociales el subsidio a la infancia, que actualmente reciben las familias con hijos y que el Gobierno sólo quiere facilitar a los hogares con menores recursos económicos. Los 'pares' apoyaron la enmienda presentada por el obispo de Leeds, John Packer -por 252 votos a favor frente 237 en contra- para excluir la prestación infantil del proyecto.
Lord Ashdown, exlíder del Partido Liberal Demócrata, votó por primera vez en contra del Gobierno de coalición -formado por conservadores y liberaldemócratas- por considerar que la medida tendría un impacto "totalmente inaceptable" para los niños.
Al defender su enmienda, el reverendo John Packer afirmó que el subsidio a la infancia es un "beneficio universal" y es "equivocado verlo como una prestación social".
Sin embargo, el ministro británico de Trabajo y Pensiones, Iain Duncan Smith, defendió hoy el plan por considerar que el Gobierno puede ahorrarse unos 600 millones de libras (690 millones de euros) anuales, con lo que ayudará a reducir el déficit.
Duncan Smith señaló que cualquier derrota que el proyecto de ley pueda sufrir mientras está en los Lores será descartado una vez que el texto de legislación vuelva a la Cámara de los Comunes.
"Estamos determinados a que nuestras reformas sean implementadas en su totalidad y vamos a llevar esto otra vez a la Cámara de los Comunes para revertir esta decisión", dijo un portavoz del Gobierno.
El Gobierno ya ha sufrido otras derrotas en la Cámara de los Lores sobre otras partes del proyecto de ley de Reforma Social.
Básicamente, el plan del Gobierno que se recoge en el proyecto de ley de reforma del sistema de bienestar social presentado hace casi un año se basa en unificar las diferentes ayudas que ahora existen en una sola subvención universal a partir de 2013, y crear un "programa del trabajo" para ayudar a los desempleados a encontrar empleo, que incluye tanto incentivos como sanciones.
Así, las personas que rechacen los trabajos que se les ofrezcan se arriesgan a perder su derecho a recibir ayudas sociales durante tres años.
Estas pretensiones no parecen haber erosionado la imagen de los conservadores, ya que un sondeo sobre intención de voto hecho por la firma ICM y publicado hoy en el periódico británico The Guardian indica que el Partido Conservador aventaja en cinco puntos a los laboristas de Ed Miliband, primeros de la oposición. Los 'tories' obtuvieron un respaldo del 40%, un ascenso de tres puntos frente a otra consulta del pasado diciembre, mientras que los laboristas bajaron un punto, hasta el 35%. El sondeo se realizó a través de 1.033 entrevistas teléfonicas entre el 20 y el 22 de enero, un día antes de que el Gobierno británico perdiera la votación en la Cámara de los Lores.
El Partido Liberal Demócrata, tercera formación del país y que está en coalición con los conservadores, bajaron un punto hasta el 16%, de acuerdo con la encuesta.
Según 'The Guardian', la última vez que los 'tories' recibieron el 40% de apoyo fue en marzo de 2010, poco antes de las elecciones generales, celebradas en mayo de ese año.
El rotativo comenta que el resultado de ese sondeo añadirá presión sobre el líder laborista, quien en las últimas semanas ha recibido críticas en la prensa por su desempeño al frente del partido.