El déficit estatal para 2012, con el ajuste que aportará la participación de la banca en la quita de los bonos griegos, se situará en el 5,4 % del PIB, desde el 9 % de este año, según el ministro de Finanzas de Grecia, Evangelos Venizelos. Por primera vez se espera un superávit primario del 1,1 % del PIB equivalente a 2.420 millones de euros, pese a la contracción de la economía y la caída del consumo.
La deuda soberana en 2012 se prevé que se reduzca al 145,5 % del PIB, tras la participación de la banca en la quita de los bonos estatales griegos en manos privadas, lo que supone una disminución del débito desde el 161,7 % de 2011. Venizelos declaró que "los objetivos están basados en gran parte en el aumento de los ingresos netos pese a la recesión, que se espera que sean de 54.400 millones de euros".
Los presupuestos están basados en gran parte en el dinero que el Gobierno prevé recaudar de los impuestos adicionales sobre la propiedad, equivalentes a 3.600 millones de euros en relación a los 1.100 millones obtenidos este año. También el borrador vaticina una tasa de paro del 17,1 % en 2012, comparado con el 11,9 % alcanzado en 2010 y una media del 15,4 por ciento en 2011.
Además, pronostica una contracción de la economía del 2,8 %, superior al 2,5 % previsto inicialmente para 2012, mientras que las inversiones estatales continuarán disminuyendo, en un 4 % en 2012, en relación al 2,9 % de este año, y el consumo privado se reducirá aun más, en un 4,1 %.