Alternativos y emergentes
El buen funcionamiento de los fondos 'hedge' en 2010 no acaba con las dudas que generan.
La semana pasada hacíamos balance de los resultados de la industria de fondos de inversión tradicional en España, observando el buen comportamiento medio del sector en sus dos principales clases de activo: renta variable (+16%) y renta fija (+7%). Más atrás el foco lo ponía en el creciente subsector de fondos de retorno absoluto, bajo el formato legal UCIT, para llamar la atención sobre la presión de resultados que afrontarán en los próximos trimestres, ante la inevitable y constante comparativa con sus hermanos mayores: los fondos de inversión alternativa o como los denomina el regulador español, los fondos de inversión libre.
Procede repasar la mediática y polémica industria de fondos hedge, que tras un mal comportamiento durante la pasada crisis de los mercados financieros, se encuentra en el punto de mira. A falta de datos definitivos de diciembre, la rentabilidad media (en dólares) del conjunto de la industria, según varias de las entidades más acreditadas en la elaboración de estos índices (Dow Jones Credit Suisse, Eurekahedge ) se acercaba al 8%. Teniendo en cuenta que diciembre ha sido un buen mes para los activos de riesgo (bolsas, materias primas, emergentes ) probablemente el año se salde con una rentabilidad alrededor del psicológico nivel del 10%. El patrimonio gestionado también creció significativamente.
Se podría concluir que ha sido un buen año, tras el mal 2007-2008 y el titubeante 2009. Pero hará falta bastante más recorrido de buenos resultados para restablecer la confianza en la industria de fondos de gestión alternativa, ya que al calor de unos mercados alcistas (virtualmente casi todos los activos de riesgo han funcionado) casi cualquiera ha salido bien en la foto. Las dudas no pueden desaparecer, en vista del comportamiento del 2010, cuando los hedge incurrieron en pérdidas en los meses conflictivos, de mayo a junio, o en noviembre. Así, cuando los activos de riesgo sufrieron, también lo hicieron los hedge en general, aunque con el control de riesgo que se espera de los mismos. La duda sobre qué puede suceder con sus resultados, si estos minirrebotes de la crisis se extendieran o se tornaran en un ciclo negativo, es por tanto justificada. Nadie quiere volver a sufrir las minusvalías de 2008 en una opción de inversión altamente sofisticada y de muy elevadas comisiones, de la que se espera, en el peor caso, un límite de pérdidas reducido.
Otro dato que apuntan los críticos es que el análisis de correlaciones con diferentes clases de activo y factores de riesgo, sugiere que alguno de los principales tipos de estrategias hedge, como la global macro, se encuentra significativamente ligada a una exposición larga en emergentes y materias primas. Estos son precisamente dos de los activos más cíclicos y que, tras el crédito, más dañó los resultados de un buen número de fondos hedge durante la pasada recesión y el último ciclo bajista. El dúo emergentes y materias primas es una de las temáticas de inversión que se repite casi invariablemente en las recomendaciones para 2011 de la gran mayoría de gestoras, bancas de inversión e inversores institucionales en general. Incluso los datos más recientes de flujos de dinero en fondos ponen de relieve como los inversores minoristas se han subido plenamente a este carro inversor, como ya lo hicieron en 2006 y buena parte del 2007. Si bien los datos a nivel de economía global y el de los propios países emergentes (que apuntan a una continuación de fuertes crecimientos con una capacidad de momento suficiente para controlar la inflación y el sobrecalentamiento) permiten aventurar que los activos emergentes conseguirán buenas rentabilidades otro año más, los componentes más clásicos de una burbuja financiera ya se están haciendo presentes. Algunos de los propios gestores de fondos hedge y de los mismísimos fondos emergentes ya están haciendo referencia a valoraciones infladas. Difícilmente se podrá detener esta incipiente burbuja aunque su recorrido y magnitud serán difíciles de establecer. Probablemente el momento más crítico aparecerá cuando las inestabilidades políticas provenientes del propio desarrollo, en el caso de China, se vean combinadas con una desaceleración económica global.
Más allá del factor emergente, el desglose del amplio espectro de estrategias pone de relieve como en 2010 el arbitraje de deuda (lleno de oportunidades ante la aparición de tendencias claras) y el global macro fueron triunfadores, con rentabilidades medias claramente por encima del 10%. En el lado negativo, los long-short de renta variable sufrieron ante el dominio de los factores macro y los fondos de fondos hedge multiestrategia se siguieron viendo penalizados por un modelo de negocio y operativo poco competitivo. El declive relativo de estos últimos, en términos de patrimonio, como esperaba, continuó.
Juan Manuel Vicente Casadevall, EAFI. Kessler & Casadevall Asesoramiento Financiero
Retorno absoluto UCIT
Lipper establece categorías para los fondos regulados de retorno absoluto en función de los distintos niveles de riesgo observados en ellos y de las clases de activo.
Los niveles de riesgo establecidos para diferenciarlos son: bajo, medio y alto. En el gráfico anexo se muestran sus rentabilidades medias (para los de divisa en euros) durante el pasado año 2010.
Los resultados pueden admitir cierta discusión pero las rentabilidades, para un producto con enfoque global, parecen escasas a la vista de un desempeño de los mercados financieros globales que ha resultado ser positivo.