Bancos y cajas rebajan su apelación al BCE en septiembre
Las entidades financieras españolas redujeron en septiembre la deuda contraída con el Banco Central Europeo (BCE) hasta los 97.682 millones de euros, que representa el 21,8% de la financiación total al eurosistema. Dos meses antes era del 29,1%.
La deuda de los bancos españoles con el BCE se ha reducido en el mes de septiembre hasta los 97.682 millones de euros -un 11% menos que en agosto- después de tres meses por encima de la barrera de los 100.000 millones. Según los últimos datos publicados por el Banco de España, la financiación a las entidades nacionales constituye el 21,8% de la apelación total del eurosistema. En agosto era del 25,6%, y en julio alcanzó su cota máxima al llegar al 29,1%.
Desde mediados de 2009, las peticiones de financiación de la banca española se habían mantenido más o menos estables entre los 70.000 y los 80.000 millones de euros, hasta que se dispararon el pasado verano (126.300 en junio y 130.209 millones en julio) como consecuencia de las dificultades de financiación por la incertidumbre existente en el mercado.
La publicación de las pruebas de resistencia de prácticamente toda la banca española han permitido que los mercados se vayan abriendo poco a poco y que las entidades tengan acceso a la financiación mayorista. Los expertos aseguran que esta cifra seguirá una tendencia a la baja según se vaya consolidando la buena imagen de las instituciones financieras nacionales en el extranjero.
Por su parte, la financiación al conjunto del Eurosistema vivió un incremento en septiembre hasta los 447.722 millones de euros, un 4,5% más que en el mes anterior (en términos absolutos la cifra repuntó en 19.258 millones de euros). Algunos de los países cuyas entidades financieras han reducido también su deuda con el Banco Central Europeo (BCE) son Portugal y Grecia. Fuentes del sector estiman que la deuda de Irlanda se podría haber elevado.
Ayudas con fecha de caducidad
El Banco Central Europeo (BCE) ha subrayado el carácter "temporal" de las medidas de estímulo adoptadas para mantener y estimular el flujo de crédito hacia familias y empresas, así como su compromiso para retirarlas "de manera gradual" estos instrumentos de intervención a medida que se normalicen las condiciones financieras."Estas medidas excepcionales y audaces han resultado claves para el mantenimiento de la disponibilidad de crédito", afirma el organismo de Fráncfort en su último boletín mensual. "Dada su naturaleza temporal, algunas de estas medidas no convencionales ya han sido retiradas y otras lo serán de manera gradual", apunta la entidad.La institución presidida por Jean-Claude Trichet anunció también recientemente el endurecimiento de las condiciones para acudir a las subastas de liquidez que lleva a cabo, por lo que los próximos meses estarán marcados por esta decisión y la deuda de las entidades con el BCE podría experimentar una reducción.