BAA se reúne hoy con el sindicato para tratar de frenar la huelga de aeropuertos
BAA, propiedad del grupo español Ferrovial, y el sindicato que representa al personal de tierra de los seis aeropuertos británicos que dirige el gestor aeroportuario, se reúnen hoy en un intento por evitar una huelga que alteraría los planes de miles de pasajeros.
El encuentro previsto para hoy se celebrará, en una ubicación que no ha sido desvelada, por mediación del Servicio de Arbitrio y Conciliación (Acas), que interviene en disputas laborales.
Las movilizaciones de los empleados de tierra, en protesta por las condiciones salariales, pueden provocar el cierre de los aeropuertos de Heathrow, Stansted, Southampton, Edimburgo, Glasgow y Aberdeen. Dichos trabajadores están descontentos por lo que consideran una "miserable" oferta de subida salarial: un 1% para 2010 después de haber sufrido una congelación en 2009.
El pasado jueves, miembros del sindicato Unite, que agrupa al mencionado colectivo, votaron a favor de la medida de fuerza para mostrar su disconformidad por las citadas condiciones.
BAA subrayó la pasada semana su disposición a negociar y confió en "poder alcanzar un acuerdo rápidamente por el interés de los viajeros", de las aerolíneas y del personal, porque "la mayoría" no votó a favor de la huelga, según un portavoz de esta empresa. Ambas partes tratarán de consensuar hoy un acuerdo a la vez que los líderes del sindicato celebrarán otra reunión para perfilar una posible estrategia en caso de proceder con la huelga.
Si Unite opta finalmente por anunciar el paro, éste podría comenzar la semana del 23 de agosto, puesto que por ley deben dar un aviso de siete días.
De no llegar a un acuerdo, los seis aeropuertos nombrados deberán cerrar sus operaciones por carecer de personal estratégico como agentes de seguridad o bomberos, quienes tienen previsto secundar la huelga. La empresa considera que su oferta salarial a los trabajadores es "razonable", en un momento en que "BAA y sus aerolíneas clientes están viendo un declive del número de pasajeros debido al impacto de la recesión y de la nube de ceniza volcánica".
El mes pasado, la compañía informó de que su beneficio operativo en el primer semestre del año se redujo en un 37,8% frente al mismo periodo de 2009, hasta los 247 millones de euros. Sin embargo, según anunció BAA días después, el tráfico en sus seis aeropuertos británicos aumentó, con Heathrow a la cabeza, que el pasado mes de julio registró un tránsito de 6,7 millones de pasajeros, la cifra mensual más alta de su historia.