Google: plantar cara al precio
Google escoge la moralidad sobre los beneficios con el cierre de su portal de China -y ya ha pagado un considerable precio como resultado-. Aunque el buscador mantendrá su punto de apoyo en el mayor mercado de usuarios de internet del mundo, reconduciendo las búsquedas a Hong Kong y manteniendo su personal. Eso significa que no empezará desde el principio si los censores de Pekín relajan su control en el futuro.
Google amenazó en enero con dejar de censurar las búsquedas políticamente sensibles a instancias de Pekín. Pero ha retirado sólo la mitad. Por ahora, los usuarios pueden utilizar todavía su web de Hong Kong -aunque se ha informado de que las autoridades chinas están censurando las búsquedas más controvertidas a nivel político como las medidas represivas en la plaza de Tiananmen en 1989-.
Dicho esto, Google podría tener que esperar largo tiempo para que Pekín cambie de opinión y, al mismo tiempo, su presencia en el terreno podría suponer una pérdida de activos. La empresa es poco probable que mantenga su 30% de cuota de mercado de los ingresos por publicidad en China. El tráfico puede también que caiga si los usuarios de internet chinos se cansan de los tiempos de conexión -asumiendo que Pekín no cierre completamente Google-.
Los trabajadores restantes puede que tampoco se queden. La empresa de Silicon Valley ha sido acusada públicamente por funcionarios del Gobierno de violar una promesa escrita. Puede ser difícil mantener la alta calidad de los jóvenes ingenieros de Google buscada en el pasado si sienten que sus empleados tienen poco futuro en China.
Actualmente, los ingresos que supone el mercado chino sólo es de un 1% a un 2% del total anual de Google. Pero la trayectoria de crecimiento es exponencial. Como resultado, las empresas de internet chinas se revalorizan mucho. Su rival Baidu cotiza en el Nasdaq a 41 veces el pronóstico de sus beneficios para 2011, el doble de Google. Desde que las empresas de EE UU declararon a mediados de enero su intención de parar la censura en los resultados de las búsquedas en China, las acciones cayeron alrededor de un 6%. En el mismo periodo, Baidu creció un 40%.
Google podría perder credibilidad entre los usuarios mundiales si no deja China de alguna manera. Retirándose sólo a medias, el gigante de las búsquedas salva un poco la cara, aunque a un precio muy alto.
Por Wei Gu