El presidente de Ford se muestra prudente ante Obama sobre la evolución del sector del automóvil
El presidente del fabricante de vehículos Ford, William Clay Ford, se mostró prudente sobre la evolución de la industria del automóvil para el próximo ejercicio, en el que no espera que se produzca un gran aumento de ventas, durante la reunión mantenida con el presidente estadounidense, Barack Obama.
Ford señaló que las previsiones de su compañía no contemplan que durante el próximo ejercicio se produzca un fuerte incremento de ventas, aunque indicó que es posible que haya un ligero incremento de los volúmenes de producción en comparación con 2009.
"No planeamos que se produzca una gran subida el año que viene. Si se produce una, genial, la asumiremos", añadió, al tiempo que indicó que sus previsiones para 2010 son conservadoras, y resaltó que después de que este ejercicio hayan reducido sus niveles de ''stock'', amoldarán en 2010 su volumen de fabricación a la demanda del mercado.
Al mismo tiempo, el máximo responsable de la corporación del óvalo puso de manifiesto la debilidad de la economía de Estados Unidos, especialmente en lo que se refiere a los niveles de paro. "Mientras el paro se mantenga alto, es difícil sentir que la economía va bien", añadió.
Ford hizo estas declaraciones después de mantener una reunión en el despacho oval con Barack Obama, en la que le informó de la reorganización que ha llevado a cabo la industria del automóvil durante este año.
Así, el máximo responsable del fabricante con sede en Dearborn (Michigan) aseguró que durante el encuentro con Obama no se habló de previsiones de la industria del automóvil o de las políticas medioambientales del Gobierno de Estados Unidos, que contempla un importante incremento de la eficiencia de los vehículos en el país.
"Para lograr una mejora de la eficiencia en el consumo de combustible, no vamos a dejar de lado el place de conducción", explicó, al tiempo que resaltó que su compañía continúa implementando la estrategia de producto adecuada.