Los intereses japoneses de American Airlines
American Airlines está volando -o al menos las acciones sí lo están haciendo-. Esto es porque la aerolínea estadounidense ha aliviado los temores por la liquidez con la venta anticipada de millas de sus viajeros frecuentes a Citigroup al tiempo que obtiene financiación de General Electric para nuevos aviones. Pero este entusiasmo puede necesitar atemperarse. AMR, la matriz cotizada de American, puede que necesite desviar algunos fondos para compras que no generan valor.
Tiene sentido que los inversores se sintieran tranquilos con la noticia. American, como otras aerolíneas, ha pasado apuros para salir adelante tras el récord alcanzado por el precio del combustible en 2008 y la caída en la demanda. A finales de junio, American tenía 900 millones de dólares de deuda que debía pagar en el segundo semestre de 2009 y 1.400 millones de dólares en 2010. Retirar la bancarrota de los asuntos pendientes, al menos por ahora, es claramente un paso en la dirección correcta.
American recibe 1.000 millones de dólares de Citi a cambio de las millas de su viajeros frecuentes. El banco, por su parte, repartirá aquéllas como recompensa para los poseedores de sus tarjetas de crédito. Los detalles sobre el precio son secretos, pero el acuerdo es muy común. El año pasado, Delta y American Express pusieron en marcha un acuerdo similar. El valor secreto de cada milla depende de las restricciones de utilización, la fecha de caducidad y la resistencia global de la red de aerolíneas.
Y es este último punto el que aumenta algunas preocupaciones. American está actualmente compitiendo con Delta por los beneficios de una unión con Japan Airlines (JAL), que anda corta de dinero. American depende de JAL para muchos de sus negocios asiáticos por lo que si finalmente no cerrara la operación saldría peor parada.
American puede incluso necesitar invertir dinero en efectivo para comprar una parte de JAL y mantener el statu quo. A pesar de que están probados los beneficios de pertenecer a una alianza y que JAL sea estratégicamente importante, no parece lo ideal invertir en una compañía que no aporta muchos ingresos. Pero al menos American ahora tiene un poco más de flexibilidad para mantener JAL a su lado.
Por Aliza Rosenbaum