Mensajes complicados
Lloyds se ha librado de una buena. Después de un primer semestre cargando un espantoso lastre de deudas de cobro dudoso, las acciones subieron un 13% ayer por la mañana.
Los inversores han debido contagiarse del optimismo del presidente Eric Daniels. Si no, la reacción hubiera sido otra. El montante total de las provisiones de Lloyds alcanzó los 13.400 millones de libras, muy por encima de los 11.000 millones previstos. Los 4.000 millones de libras que el banco ha perdido estaban dentro de lo esperado, pero la cantidad se ha reducido por la ganancia de 3.700 millones de la buena valoración de HBOS.
El mensaje de Daniels de que las deudas morosas no empeorarán se basa en dos suposiciones para 2009: una reducción del PIB del Reino Unido de no más del 4% y una caída del 7% en el precio de la vivienda. Una cifra atrevida.
El máximo perjuicio que pueden causar las deudas con riesgo de impago quizás sí haya pasado. Pero los cargos por provisiones probablemente lleguen a los 20.600 millones de libras este año y a 13.700 millones en 2010. Además, el bajísimo tipo base del Reino Unido reduce los beneficios obtenidos de las cuentas corrientes sin intereses.
El Gobierno británico está intentando ayudar a los accionistas de Lloyds. Tres cuartos de las provisiones vinieron de créditos asignados a su plan de garantía de activos, que puede salirle caro a Lloyds. Quizás se pida a los bancos que financien una proporción mayor de préstamos con depósitos en vez de fondos al por mayor más baratos.
Ayer, las acciones de Lloyds cotizaban con una prima del 7% sobre su valor nominal estimado para 2010. El mercado no ha descontado la incertidumbre.
George Hay