_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

El mejor acuerdo para todos

Los padres a menudo intentan convencer a sus hijos para que hagan algo difícil diciendo que es por su propio bien. Ferrovial está haciendo algo similar respecto a su propuesta de fusión mediante canje de acciones con Cintra, su filial de autopistas participada en un 69%. Dice que la transacción tiene sentido para ambas partes.

Ferrovial ha endulzado el trato ofreciendo condiciones mucho mejores a las que el mercado esperaba. Los minoritarios de Cintra recibirán una acción de Ferrovial por cada cuatro suyas, lo que equivale a una prima del 27% sobre su valor de mercado al cierre del pasado jueves. El mercado esperaba una relación de uno por cinco en el canje. De ahí que las acciones de Cintra subieran el viernes y las de Ferrovial bajaran.

Pero el valor del acuerdo vale menos para los accionistas de Cintra que cuando fue propuesto por primera vez en diciembre.

La fusión tiene cierta lógica. Ambas compañías controlan grandes activos en infraestructuras, aunque es difícil ver solapamientos entre la gestión de Cintra de la autopista de peaje canadiense E407 y la operación de aeropuertos de Ferrovial en el Reino Unido a través de BAA, de la que es propietaria. Cintra también es intensiva en capital, y podría beneficiarse del efectivo adicional del negocio de construcción y servicios de Ferrovial a medio plazo.

Pero el trato tiene mucho más sentido para Ferrovial. Simplificará su estructura y le dará acceso al propio efectivo de Cintra, que podría llegar a los 1.000 millones de euros tras el plan de venta de activos. Ferrovial acaba de refinanciar su deuda corporativa, y el efectivo podría ser utilizado para inyectar liquidez en la endeudada BAA. Ferrovial también podría usar las pérdidas pasadas de Cintra por impuestos como un escudo para sus propios beneficios.

Los accionistas rebeldes de Cintra, que representan el 4% de sus títulos, presionaron para conseguir un intercambio a una relación de 1:1,5. No estarán muy contentos, pero la aprobación del trato requiere una mayoría simple de las acciones. La familia Del Pino, que controla el 58% de la compañía, verá mermarse su participación en el nuevo grupo hasta un 44% tras el acuerdo. Ferrovial aumentará su capital flotante y tendrá un balance más sólido. A cambio, quizás, de unos minoritarios contrariados.

Por Fiona Maharg-Bravo.

Archivado En

_
_