_
_
_
_
Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

Que el DNI digital sea útil de una vez

El DNI digital es uno de esos dispositivos que, bien explicado, hacen que los ciudadanos se sientan miembros de una sociedad altamente avanzada, en la primera línea tecnológica. Sus múltiples utilidades relacionadas con la informática y las telecomunicaciones y las facilidades que, según las campañas que los promueven, van a proporcionar hacen que los políticos estén encantados de anunciar su extensión por todo el país y los ciudadanos de recibirlos. El problema es cuando esas ilusionantes expectativas chocan con una realidad mucho más perezosa ante los avances.

El primer DNI digital se expidió en Burgos el 16 de marzo de 2006. Según se dijo entonces, la innegable utilidad del chip que lleva incluido iba a permitir a los ciudadanos tramitar todo tipo de gestiones con la Administración, además de proporcionar otros muchos usos, comodidades y seguridades en su empleo telemático en el sector privado. Tres años después, y con nueve millones de documentos expedidos, el Gobierno y las asociaciones de empresas tecnológicas, Asimelec y Aetic, preparan un convenio para que los aparatos que fabrican incluyan lectores del DNI digital. Es un estimable esfuerzo para impulsar de una vez el uso de ese documento electrónico. Pero también es una prueba evidente de que algo no se ha hecho en el orden debido.

Archivado En

_
_