Solbes, a favor de que Repsol siga siendo "gestionada por España"
El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, se ha mostrado a favor de que Repsol siga siendo una empresa "gestionada por España" y "vinculada a los intereses fundamentales de España", y ha señalado que no ve "inevitable" la venta del 30% de la petrolera española a la rusa Lukoil.
"Nada es inevitable mientras nada esté cerrado", ha dicho un enigmático Solbes al ser preguntado por si todavía era posible encontrar una solución española para Repsol o era inevitable la venta a Lukoil. "Yo creo que el interés de todos es que Repsol siga siendo una empresa gestionada por España y evidentemente vinculada a los intereses fundamentales de España", ha asegurado a la entrada de la reunión de ministros de Economía de la zona euro.
"Es verdad que está en el sector privado, es verdad que los responsables, los propietarios, tienen el margen de maniobra que da el sector privado. Pero se está trabajando para la mejor solución que sea posible para todos", ha resaltado Solbes. Preguntado por las denuncias del PP de que el Gobierno ha dado un trato de favor a la constructora Sacyr, el vicepresidente ha respondido que el PP acusa al Ejecutivo "de eso y de todos los males del infierno, o sea que es uno más".
Solbes está en Bruselas para asistir a la reunión de los ministros de Economía de la Unión Europea que ha parobado la rebaja a 20 días laborables, prorrogables 10 días más, del plazo máximo en el que un Estado miembro estará obligado a pagar a los ahorradores el depósito mínimo garantizado, recientemente incrementado hasta un mínimo de 50.000 euros ampliables hasta los 100.000, en caso de quiebra de una entidad financiera. Tras la aprobación del Eurogrupo, el acuerdo queda pendiente únicamente del visto bueno de la Eurocámara.
En este sentido, ha reseñado que la respuesta de los ministros de Economía al plan de estímulo fiscal propuesto por Bruselas ha sido "positiva". "Tenemos que esforzarnos" por llegar a la cifra de 200.000 millones de euros (un 1,5% del PIB) incluida en un plan diseñado para sostener la demanda y combatir la recesión, ha agregado. Francia y Reino Unido abogaban por un plan de estímulo mayor, mientras que Alemania se resiste a aumentar el gasto público.