Fomento endurece los requisitos de los contratos de obra pública
La Sociedad Estatal de Infraestructuras de Transporte Terrestre (Seitt), dependiente del Ministerio de Fomento, ha comenzado a licitar obras con un nuevo pliego que endurece los requisitos que se exigen a las empresas que contraten con esta entidad. Se trata de evitar las desviaciones de costes y el retraso en la finalización del proyecto.
El ministerio quiere darle a la Seitt un impulso, por lo que los Presupuestos para 2009 contemplan más aportaciones de capital para esta sociedad que se creó a finales de 2005. Así, está previsto que el próximo ejercicio realice una inversión de más de 1.700 millones en obras de carreteras y otros 2.060 millones en ferrocarriles.
El pliego tipo de licitación que utiliza esta sociedad y al que ha tenido acceso CincoDías se ha adaptado a las nuevas exigencias de la Ley de Contratos Públicos, por lo que plantea una mayor complejidad técnica, según las fuentes consultadas por este diario.
Entre las novedades que introduce, destaca la obligatoriedad de presentar una 'memoria constructiva' y un exhaustivo 'programa de trabajo' en el que la mesa de contratación valorará la coherencia de la planificación de la obra con los equipos materiales y humanos que indique la empresa. Además, se tendrá en cuenta la calidad que se quiere obtener en cada tramo de la obra y lograrán mejores puntuaciones aquellos trabajos que incluyan propuestas de gestión medioambiental. Otro de los aspectos que más se tendrá en cuenta es la utilización de tecnologías que hayan sido desarrolladas por el contratista en el marco de proyectos de I+D+i que supongan una mejora de la calidad y valor técnico de la obra y cuya justificación pueda ser debidamente documentada.
Todos estos aspectos formarán parte de la puntuación técnica de cada oferta y si en algún caso la mesa considerara que no se alcanza un nivel mínimo de calidad, esa oferta no será tomada en consideración.
En el ámbito económico, el nuevo documento aborda el espinoso asunto de las bajas y establece, como también figura en el plan de renovación de las autovías de primera generación, las fórmulas matemáticas que tendrán que aplicarse en cada caso.
Las fuentes consultadas argumentan que todos los intentos por evitar que las empresas sigan pujando muy por debajo del precio de oferta (demasiadas veces se supera el 30%) son bienvenidos, aunque consideran que se podía haber sido más ambicioso otorgando más protagonismo al apartado técnico. Sí se contempla que aquella oferta que presente un presupuesto muy por debajo de la media deberá explicar en un plazo no superior a quince días el por qué de esos descuentos respecto al precio de licitación. Si los argumentos de la empresa convencen al órgano de contratación, podrá volver a ser tenida en cuenta. De lo contrario, no resultará adjudicataria.
Con estos controles más férreos se trata de poner coto a los presuntos incumplimientos de contrato que en ocasiones denuncian las administraciones licitantes y las compañías adjudicatarias que suelen traducirse o bien en costosos modificados de la obra o en retrasos en su finalización o en ambas cosas.
A cambio, la Seitt se compromete a ser diligente en los plazos de resolución de los concursos (se da dos meses para la adjudicación provisional) y a pagar en los 60 días que dice la ley las certificaciones de obra.
El endeudamiento de la Seitt, a debate
El Departamento que dirige Magdalena Álvarez quiere convertir a la Seitt en el gran ente inversor del transporte terrestre, única modalidad que no contaba con un organismo equiparable al Adif en ferrocarriles, AENA en aeropuertos y Puertos del Estado en el transporte marítimo. Fuentes de Fomento admiten haber estudiado si era o no viable dotar a esta entidad de capacidad de endeudamiento para incrementar su potencial inversor. El problema es que Bruselas impone que estas sociedades deben generar ingresos, 'y en este país nadie quiere pagar por usar las infraestructuras', dicen en el Ministerio.