Bruselas recomienda eliminar las restricciones a la entrada de trabajadores de los nuevos estados de la UE
La Comisión Europea ha publicado hoy un informe sobre el impacto de la libre circulación de trabajadores procedentes de los países de la ampliación. El documento, presentado en rueda de prensa por el comisario de Empleo, Asuntos Sociales e Igualdad, Vladimir Spidla, destaca la contribución que los trabajadores de la Europa central y oriental han tenido para mitigar las carencias de mano de obra en los Quince y mejorar la economía de la UE en su conjunto.
Será el próximo 30 de abril cuando los Estados miembros han de decidir si mantienen, modifican o eliminan las medidas transitorias que actualmente limitan el acceso de mano de obra procedente de los nuevos socios comunitarios.
Spidla se mostró partidario de la eliminación de estas disposiciones, ya que, según afirmó, "tras la ampliación de la UE hay la tendencia apunta a un ligero crecimiento de empleo, el paro tiende a la baja y el crecimiento económico se acelera lentamente". El comisario insistió en que, según los datos del informe, "los miedos son desproporcionados" porque "no hay ninguna presión inmediata para que se produzcan oleadas de inmigrantes".
En esta línea, Spidla argumentó que los flujos de trabajadores procedentes de países terceros tiene una mayor influencia en el mercado europeo porque es siete veces superior a la de los procedentes del Este.El informe, elaborado con datos proporcionados por los propios Estados miembros, evalúa la incidencia de la entrada de los 10 nuevos socios en el mercado laboral europeo desde mayo de 2004, fecha en la que se produjo su ingreso en la UE.
Reino Unido, Irlanda y Suecia fueron los únicos tres países de los Quince que no aplicaron ninguna restricción a la libre circulación de trabajadores. Según la Comisión, éstos han experimentado un elebado crecimiento económico, una reducción del desempleo y un incremento del empleo.
Disposiciones transitorias
En cuanto a los países que recurrieron a disposiciones transitorias, Bruselas señala que, en los casos en que los trabajadores consiguieron acceder legalmente se integraron sin problemas en el mercado de trabajo.
Estas restricciones fueron introducidas en mayo de 2004 por todos los antiguos Estados miembros, con la excepción de Irlanda, Suecia y Reino Unido, a los trabajadores de los ocho nuevos Estados miembros de la Europa central y oriental. Asimismo, tres nuevos Estados miembros impusieron restricciones recíprocas a la circulación de trabajadores en sentido opuesto: Hungría, Polonia y Eslovenia.
En el citado informe se revela que las restricciones nacionales han tenido una "escasa repercusión" a la hora de controlar la circulación de los trabajadores. "Los hechos muestran que no existe ningún vínculo directo entre la magnitud de los flujos de movilidad y las disposiciones transitorias en vigor. En última instancia, los flujos de movilidad se rigen por factores relacionados con las condiciones de la oferta y la demanda", reseña.