Las vacaciones duran más en Europa
La vieja Europa es uno de los destinos tradicionales del turismo de EE UU. París, Roma o Berlín tienen para los estadounidenses el encanto de las películas en blanco y negro. Pero a la vista de los resultados de una reciente encuesta, es posible que también empiece a ser su objetivo a la hora de buscar un empleo con menos horas de trabajo. Y es que si en EE UU lo habitual es disponer de menos de 10 días de vacaciones al año, en Europa 8 de cada 10 trabajadores disfruta de más de 21 días de descanso.
Una encuesta del portal de empleo Monster, realizada a partir de 86.000 votos, revela las diferencias culturales que en materia de vacaciones hay a uno y otro lado del Atlántico. En Canadá, el 31% de los votantes de la encuesta afirman disponer de un máximo de 15 días de vacaciones al año y aproximadamente el mismo porcentaje reconoce disfrutar de más de 21 días. En total, lo más frecuente es que las vacaciones anuales de un empleado canadiense duren menos de 15 días.
El empleado español que ahora esté pasando el ecuador de sus días de sosiego puede mirar, si así lo quiere, por encima del hombro a su compañero de sombrilla italiano. No en vano son los europeos cuyo periodo vacacional es más corto. Para la mitad de los trabajadores italianos lo frecuente es contar con más de 21 de vacaciones. Pero esta duración afecta al 65% de los empleados de empresas españolas y casi el 100% de los trabajadores de Alemania, Francia, Dinamarca, Luxemburgo, Holanda, Suecia y Noruega.
Según el presidente y fundador de Monster, Jef Taylor, los empresarios europeos han concedido siempre ampliar vacaciones a sus empleados'. Frente a éstos, 'la cultura de trabajo norteamericana está marcada por grandes exigencias, plazos cortos y jornadas largas', aclara Taylor. Por su parte, Hernán Daguerre, de Monster Europa, cree que 'el ambiente de trabajo hoy es exigente y altamente estresante y es necesario repartir las vacaciones inteligentemente para evitar el síndrome del trabajador quemado'.
En España, donde el 43% de los votantes de la encuesta afirman disponer de más de 26 días de vacaciones, y el 22%, de entre 21 y 25 días, sólo un escaso grupo quiere disfrutarlas todas de una vez. La tendencia mayoritaria es repartir el periodo anual de descanso a lo largo de todo el año.
Más inquietante resulta la respuesta de los trabajadores de España a la pregunta: ¿qué hará a la vuelta de vacaciones? Ocho de cada diez tienen la intención de cambiar de trabajo. Aunque la mayoría esperará a encontrar un nuevo empleo antes de abandonar el actual, la seguridad no es importante para un 15%. Y es que las vacaciones también son para la reflexión laboral.
El descanso que marca la ley
Con la ley en la mano, los empleados de empresas españolas tienen 30 días de vacaciones anuales. Una cifra que sitúa a estos trabajadores en el pelotón de los afortunados de la UE. Pero hay trampa. Mientras en España las vacaciones se establecen por días naturales, en la mayoría de los Estados de la UE los días de descanso se contabilizan por días laborables.Tan sólo Portugal y Holanda acompañan a España en este singular cálculo. No obstante, las vacaciones entran en el ámbito del pacto entre empresa y trabajador. Ya sea en cada contrato o por convenio, el periodo de vacaciones se marca según las empresas.Uno de los aspectos que, en materia de días de descanso, más polémica levanta es cómo combinar las vacaciones con los días de baja. Según la norma, los días de enfermedad que coinciden con las vacaciones son días de vacaciones y no se le puede pedir a la empresa que prorrogue las vacaciones porque durante un tiempo se estuvo enfermo. No obstante, una reciente sentencia del Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas cambió este criterio.Otro tema que también hay que tener en cuenta es qué hacer con las vacaciones pendientes de disfrutar en caso de despido. Un reciente cambio legal obliga al trabajador a disfrutar de esas vacaciones sin poder pedir a la empresa su abono en dinero. Esto supone tener que retrasar el momento de cobrar el paro.