Los fondos de inversión en España incrementaron su patrimonio un 2% en abril
El patrimonio conjunto de los fondos de inversión en España se incrementó en 3.664 millones de euros ( 2,09%) en el mes de abril, alcanzando así 179.177 millones, frente a los 175.513 millones de finales de marzo. Así, en los cuatro primeros meses del año el incremento de patrimonio asciende a 8.230 millones de euros (casi un 5%). Esta fuerte subida se explica principalmente, y por este orden, por el incremento que experimentaron los fondos garantizados de renta variable, los FIAMM, y los fondos de renta fija a corto plazo.
En abril, la rentabilidad media ponderada del conjunto de todos los fondos domiciliados en España fue de 1.27%, mientras que la acumulada en el año fue de 0.59%. La rentabilidad media simple fue de 2.83% en abril y de 0.13 % la acumulada en los cuatro primeros meses del año. Por grupos de fondos, la reducción más importante se produjo en renta variable mixta internacional que perdió 7 fondos por procesos de fusión con otros de renta fija mixta que se mantienen dentro de esta última categoría.
Perspectivas
La positiva evolución de las Bolsas tras los mínimos marcados en los días previos al comienzo de la guerra en Irak contribuyó fuertemente en abril a mejorar el clima del sector de fondos de inversión. Sin embargo, los partícipes siguen orientando sus suscripciones hacia los fondos que ofrecen un mayor grado de seguridad: garantizados, FIAMM y fondos de renta fija a corto plazo, sin que haya ni el menor síntoma de que esto vaya a cambiar en un futuro próximo.
La evolución de los mercados estará sometida en los próximos meses al ritmo más o menos espasmódico que marquen los datos que se vayan conociendo sobre la evolución de la economía norteamericana y de los resultados empresariales, algo que, si bien es común a todas las etapas, adquiere particular importancia cuando se deja atrás un período de incertidumbre incrementada por la guerra, por salir de una recesión o por ambas cosas a la vez.
Una prolongación de la situación de crecimiento anémico es la expectativa más probable para lo que queda de 2003 y, previsiblemente, también para buena parte de 2004, aunque eso probablemente no impedirá un movimiento lateral ascendente de la Bolsa norteamericana (recuérdese que eso es lo que ocurrió tras la Guerra de Golfo en 1991 y 1992; en aquella ocasión, sin embargo, no ocurrió lo mismo con la bolsa española que mantuvo un movimiento bajista que duró hasta finales de 1992).