Las aseguradoras estiman que evitaron casos de fraude por valor de 95,7 millones
El cerco al fraude se estrecha, según las cifras que muestran la aseguradoras. El año pasado las reclamaciones sospechosas de fraude alcanzaron los 119,6 millones de euros. Las entidades pagaron sólo un 20% de esta cantidad, es decir, 23,9 millones. A la luz de estos dos datos, estiman que el fraude que han evitado al cierre del año pasado se situó en 95,7 millones (sin contar con los gastos de detección), según un informe de la asociación Investigación Cooperativa entre Entidades Aseguradoras (ICEA).
Las entidades consideran este fraude en un amplio sentido, que abarca desde el dato engañoso que el cliente da al contratar una póliza hasta las exageraciones en un parte de daños y las estafas. El pago de la indemnización se hace medido al milímetro.
Los casos de fraude detectados fueron 62.459, 'lo que supone un aumento espectacular, del 35%, con respecto al número registrado en 2001', señala José María Olazábal, director de recursos humanos y formación de ICEA, la asociación que elabora los informes del sector de seguros.
Las herramientas informáticas cada vez más sofisticadas contribuyeron sobremanera a la detección de estos casos. Las compañías gastaron en total dos millones en investigarlos.
El seguro de automóviles es el que, con diferencia, registra más intentos de engaño. En total, los conductores intentaron cobrar un total de 84,5 millones, pero las compañías sólo abonaron 21,7 millones, el 25,6%. Uno de los trucos habituales que emplean los clientes para que el seguro salga más barato es apuntar como conductor del coche a la esposa (las mujeres tienen menos accidentes) o al padre, en este último caso cuando el conductor real es el hijo menor de 25 años.
En los seguros multirriesgos fueron consignados daños presuntamente engañosos por 25,9 millones. El fraude evitado fue del 92%. Mientras, los seguros de vida son los que más escapan a la picaresca aunque también es el fraude más llamativo. Fueron reclamados 6,2 millones y las entidades sólo pagaron 133.385 euros, menos de un 3% del total.
Entre las entidades más activas en el control del fraude figuran la mutua Pelayo, tanto en automóviles como en multirriesgos; la mutua Fiact; además de Axa, Reale Vida, Mapfre Mutualidad, Vitalicio, Estrella (ambas del grupo Generali), Direct Seguros, Línea Directa o Zurich España, principalmente. Así consta en el fallo del concurso de detección de fraude que se convoca cada año para diversas categorías. Como muestra, el importe reclamado por los asegurados en el caso de Pelayo fue de 11,14 millones y al final abonó 4,1 millones, el 36% del coste inicial.