El Banco Zaragozano afronta una semana llena de incógnitas sobre su accionariado
La condena de los Albertos a tres años y cuatro meses de prisión por los delitos de estafa y falsedad en documento mercantil en la venta de los terrenos en los que se construyeron las Torres KIO de Madrid ha disparado las especulaciones de un inminente cambio de accionariado en la entidad.
Los Albertos, principales accionistas con casi el 40% del capital, han negado durante los últimos tres años una posible venta del banco. Sólo en la junta de accionistas del pasado año, en junio de 2002, admitieron que estarían dispuestos a vender su participación si se les realizaba una 'oferta' interesante.
En esas fechas, Cortina y Alcocer ya habían pasado por los juzgados por los mismos hechos, el 'caso Urbanor'. Pero en 2001 la Audiencia Provincial de Madrid sentenció la absolución de los dos empresarios y financieros por haber prescrito el delito por el que se les estaba juzgando.
El miércoles pasado, y aún sin conocerse el fallo del Tribunal Supremo, los máximos responsables del banco tuvieron que remitir a la CNMV un hecho relevante en el que reconocían que habían recibido ofertas de otras entidades para la compra de su participación, pero aseguraban que no existía un acuerdo firme para su venta. Este comunicado, enviado a la CNMV a instancias de este organismo, se producía horas después de que aparecieran en un medio de comunicación unas declaraciones de otro de sus principales accionistas, el inversor indio Ram Bhawnani, que controla el 10,6% del banco.
Bhawnani daba a entender que el banco había llegado a un acuerdo con Barclays para su venta, algo que fue desmentido por el propio accionista. Pero las especulaciones sobre las negociaciones de Barclays y el Zaragozano se dispararon a mediados de febrero, cuando el responsable en España del banco británico dijo que Barclays quería crecer en España comprando un banco mediano.
No era la primera vez que los rumores de una posible venta del Zaragozano a Barclays saltaban al mercado. Hace unos ocho meses, el banco británico reconoció que se había acercado al Zaragozano, pero que sólo se trató de un acercamiento que ni siquiera podía considerarse como negociación.
Especulaciones
El viernes, tras el fallo del Supremo, el mercado volvió a especular con la posible venta. Un portavoz del Zaragozano aseguró que la sentencia del Supremo sólo obliga a Cortina y a Alcocer a dejar sus cargos en el banco, pero no a vender su participación. E insistió en afirmar que los Albertos no iban a vender su paquete en el banco.
El portavoz de Barclays también volvió a repetir lo mismo que hace un mes: 'el banco no hace comentarios sobre rumores de mercado'.
El portavoz del Zaragozano refrendaba la apuesta de los Albertos en mantener su participación en el hecho de que se había elegido como presidente de la entidad a Felipe Echevarría, que compaginará este cargo con el que tenía hasta ahora, el de consejero delegado, con lo que se mantiene 'la línea continuista' del banco.
Echevarría es un hombre de plena confianza de los Albertos, pero tras asumir la presidencia del Zaragozano, se convierte en el único ejecutivo de un banco español que es a la vez presidente y consejero delegado a la vez.
Fuentes financieras aseguran que el Banco de España es poco partidario de que estos dos cargos recaigan en una misma persona, por lo que este nombramiento no sólo no acalla los rumores de una posible venta, sino que las acrecenta, aseguran las mismas fuentes. A ello se suma el hecho de que los Albertos tengan que afrontar en breve el pago de la sanción derivado de la sentencia del Supremo, y la venta del 40% que poseen en el banco les permitiría saldar esta sanción sin mayores problemas.
Pero a todos estos interrogantes con los que el mercado se mueve se le une otro. Fuentes jurídicas señalan que la Ley de Disciplina e Intervención del Banco de España reserva al supervisor la capacidad para declarar la nulidad de los derechos políticos correspondientes a las participaciones adquiridas irregularmente o cuando la influencia ejercida por las personas que las posean resulta en detrimento de la gestión sana y prudente de la entidad. En último extremo, eso podría obligar a los accionistas a vender su participación. Este extremo, sin embargo, es desmentido por el Zaragozano.
Otras fuentes financieras conocedoras de la situación del Zaragozano, un banco mediano saneado y atractivo, con una red de 375 oficinas, afirman que las conversaciones entre el banco español y el británico existen y se están llevando directamente desde Londres.
El precio pedido por los máximos accionistas del Banco Zaragozano había vuelto a distanciar las posturas entre ambas entidades financieras, pero tras la sentencia del Supremo esto podía volverse a reconducir.
Dimisión como consejeros de ACS y Dragados
Cortina y Alcocer abandonarán hoy previsiblemente sus cargos como consejeros de Dragados y de ACS, según anunció el vicepresidente de Dragados ydirector general corporativo de ACS, Ángel García Altozano, tras la junta extraordinaria de accionistas que celebró el sábado Dragados. Estas dimisiones derivan de la sentencia del Supremo y de las implicaciones que ésta tiene a la hora de obtener contratos de las distintas administraciones públicas.Las empresas con consejeros condenados por este tipo de delitos no pueden acudir a las licitaciones públicas, una exigencia que fuerza la salida de Cortina y Alcocer de una y otra empresa.Uno y otro empresario también están presentes en los consejos de Indra, Ence y el Banco Inversis.Más allá de estos cambios en el consejo, ACS cerró el sábado un nuevo capítulo de su camino hacia la fusión con Dragados. La junta de esta empresa fue informada sobre la opa sobre el 10% de su capital lanzada por ACS. A partir de ahora, si el proceso legal es razonablemente ágil, la fusión entre ambas empresas se puede cerrar durante la segunda mitad del año, según avanzó García Altozano.Algunos socios minoritarios aprovecharon la asamblea para cuestionar la oferta de ACS. Un inversor consideró que dado el objeto limitado de la oferta ésta eran 'migajas' en comparación con la operación de venta del paquete del SCH a ACS en mayo de 2002. La OPA es 'un mal precedente para las condiciones en las que se puede llevar a cabo la fusión', según dicho accionista, cuya intervención fue saludada con aplausos por los asistentes. El presidente de Dragados, Antonio García Ferrer, replicó que el precio propuesto en la opa es 'objetivamente muy positivo para el accionista' y añadió que los que decidan vender podrán recuperar su participación en la empresa comprando títulos en el mercado a un precio más barato.