El usuario español confía en la seguridad de los alimentos, pero "no se fía" de la información de la Administración, las empresas y los medios de comunicación en este tema, según un el ¢Barómetro del Consumidor¢, un estudio presentado hoy por la Fundación Eroski. También se destaca que el impacto del euro en los precios ha sido "mayor del previsto", mientras que sólo un 12% de los ciudadanos reclama por temas de consumo.
El análisis refleja que "han pasado los momentos de alerta" de 2001 con las crisis alimentarias y el consumidor se muestra confiado en los alimentos (la confianza obtiene 7,12 puntos sobre 10), a pesar de que, según sus datos, el 7% de los hogares ha registrado un problema sanitario relacionado con los alimentos.
"El consumidor da un toque de atención a la Administración, a las empresas y a los medios de comunicación", que obtienen en torno a 5 puntos sobre diez como fuente creíble en temas alimentarios, frente a familiares y amigos o los médicos. En los alimentos, la confianza es mayor cuanto más natural es el producto (frutas y verduras y alimentos con denominación de origen) mejora la posición de la carne (de 6,4 puntos el año pasado a 6,8 este año) y empeora la de los alimentos enriquecidos, mientras los restaurantes consiguen un notable y los de comida rápida suspenden.
Con el euro, el 54% de los consumidores cree que los precios han subido "mucho" y el 39% "algo", mientras sólo un 7% piensa que se han mantenido estables y nadie piensa que han bajado¢. Según el Barómetro 2001, solo el 5% de los ciudadanos pensaba que los precios iban a subir mucho. Quienes más piensan que se han encarecido los precios son las mujeres de entre 40 y sesenta años, de estatus social bajo y del área de Madrid ciudad y la zona norte de España.
Por regiones, los vascos y navarros son los que más confían en la seguridad de los alimentos, mientras los canarios los que menos, y Madrid y Barcelona son las zonas donde más reclamaciones formales de consumo se producen.
Internet es percibido todavía como medio seguro de compra por solo un 4% de los ciudadanos, y por el momento "somos reacios" a pagar por servicios que ahorren tiempo al hacer la compra.