Canadá y los Quince fortalecerán la cooperación en la lucha antiterrorista
El presidente José María Aznar y el primer ministro canadiense, Jean Chrétien, acordaron ayer en Toledo intensificar 'al máximo' la cooperación entre la Unión Europea y Canadá en materia de lucha contra el terrorismo. Además abogaron por concluir las negociaciones de Doha en el marco de la Organización Mundial del Comercio (OMC) antes de 2005.
Ambos dignatarios calificaron las relaciones entre Canadá y la UE como 'excelentes' y 'carentes de dificultades'. Además, sellaron una declaración conjunta que hace hincapié en la necesidad de reforzar la cooperación judicial y policial frente al terrorismo.
El documento dedica un capítulo al conflicto de Oriente Próximo, en el que hacen un llamamiento para la aplicación 'inmediata e íntegra' de las resoluciones 1.402 y 1.403 del Consejo de Seguridad de la ONU y lamentan 'profundamente' la negativa de Israel a recibir al equipo de investigación del secretario general de Naciones Unidas. Canadá y la UE instan a las partes en conflicto a dar los pasos necesarios 'para poner fin a la violencia y trabajar para el restablecimiento de un clima favorable a las negociaciones', objetivo con el que la UE y Canadá están dispuestos 'a asistir a las partes'.
Protesta de Bono
Aznar se refirió también a una cooperación más estrecha en el control de fronteras y en la lucha contra la delincuencia organizada trasnacional, que incluye las redes de inmigración clandestina.
Chrétien destacó la importancia del diálogo entre la UE y su país no sólo en materia de seguridad, sino también en otros asuntos como la situación en Iberoamérica y, en concreto, en países como Argentina, Colombia o Venezuela.
El gran ausente en la cita toledana fue el presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, quien acusó a Aznar de falta de educación por no invitarle a la cumbre. Bono dijo que él puede no pintar nada en la cumbre, pero sí tiene la obligación de 'cumplimentar al jefe del Gobierno de todos los españoles'.