Las empresas de EE UU afrontan un ajuste mayor de lo previsto
Las existencias de las empresas en Estados Unidos aumentaron un 0,4% en enero pasado, muy por encima de lo previsto por los analistas, lo que sugiere que las compañías aún deben afrontar un mayor ajuste ante la desaceleración económica.
La Reserva Federal recibió ayer un nuevo argumento para aplicar, en su reunión del próximo martes, una nueva rebaja en los tipos de interés, tal y como desean los mercados.
Las existencias de las empresas estadounidenses crecieron un 0,4% en enero, el mayor aumento en los tres últimos meses, mientras que las ventas en ese periodo no registraron ninguna variación, según datos del Departamento de Comercio. Respecto a enero de 2000, los inventarios crecieron un 5,8%.
Los analistas esperaban que las existencias crecieran un 0,1%, lo mismo que en diciembre. El dato de enero apunta que la recuperación de la primera economía del mundo no será tan rápida como se había previsto.
La variación de existencias en las empresas permite valorar el ritmo en el que los productos se trasladan desde las fábricas a los consumidores. En diciembre, los productos estaban en la tienda una media de 1,36 meses antes de venderse. Esa proporción subió a 1,37 meses en enero, el índice más alto desde marzo de 1999.
Menor producción
Es decir, que a la vista de los datos de enero las compañías están acumulando de forma creciente artículos no vendidos en sus almacenes y dada la tendencia a la baja del consumo, ello obligará a las empresas a reducir sus pedidos a las fábricas en los próximos meses.
De hecho, durante los dos últimos trimestres del año pasado, el crecimiento de las existencias de las empresas fue más alto que el de la demanda y numerosas compañías redujeron su ritmo de producción para aparejar el nivel de los inventarios con las ventas.
"No nos estamos deshaciendo de las existencias con tanta rapidez como preveíamos y quizás el ajuste de los inventarios durará un trimestre más de lo inicialmente estimado, lo que reduce las posibilidades de reactivación en el segundo trimestre y seguramente este proceso durará hasta mediados del tercero", asegura Anthony Chan de Banc One, informa Reuters.
La institución que preside Alan Greenspan toma como una de sus principales referencias, precisamente, el nivel de existencias de las empresas para valorar el grado de equilibrio entre la oferta y la demanda y cómo se van amoldando las compañías a un entorno de mayor debilidad en el consumo.
Greenspan ha venido defendiendo que en esta ocasión el ajuste de existencias será menos "doloroso" que en otros periodos de desaceleración, por el impacto de las nuevas tecnologías y el mayor nivel de información que reciben las empresas. Sin embargo, el dato de los inventarios en enero da al traste con esta teoría y abona el terreno para una nueva rebaja en los tipos de interés.
Las existencias de bienes duraderos crecieron un 0,6% y, en el caso de los automóviles, los inventarios crecieron un 0,9% en enero. No en vano, el sector industrial es el más golpeado por la actual desaceleración económica y estos datos no hacen sino reflejar su situación.
"No son buenas noticias para el sector industrial", aseguran desde National City Corp.