La Bolsa de Brasil recupera el pulso de las ganancias pese a las incógnitas económicas
La subida de tipos y el ajuste fiscal ponen el contrapunto a un mercado que está históricamente barato, beneficiado además por un dólar más débil

El mercado de acciones brasileño ha comenzado el año con pujanza y su índice Bovespa recoge una subida cercana al 10%, con fuerte tirón de sus grandes valores cotizados. Destacan las subidas de la firma de bebidas Ambev y de las entidades financieras Itaú Banco y Banco Santander Brasil, que rondan el 15%, así como las de la aeronáutica Embraer, del 22%, y la teleco TIM, del 24%.
La clave de este impulso en la Bolsa del mayor país de Sudamérica se encuentra en las bajas valoraciones de las acciones. Xavier Hovasse, gestor de fondos y responsable de renta variable emergente de Carmignac, apunta que “el mercado de renta variable brasileño es actualmente barato, lo que ha llevado a Carmignac Emergent a mantener en él una posición sobreponderada. El ratio PER (número de veces que el precio contiene el beneficio por acción) a 12 meses es de aproximadamente 7,7 veces, significativamente por debajo de la media de la última década”. Este experto atribuye esta baja valoración a la ausencia de fondos extranjeros ante el buen comportamiento el pasado año del mercado de Estados Unidos, así como en la subida de los tipos de interés, que han ajustado los precios en la renta variable. El Gobierno brasileño también ha introducido una ventaja fiscal para determinados instrumentos de renta fija, lo que hace que el mercado de renta variable sea menos atractivo para los inversores locales.
El índice Bovespa cotiza a un PER de 7,7 veces, muy por debajo de la media histórica
Una de las claves del devenir del mercado es la evolución de los tipos de interés. El banco central (Selic) subió un punto este mes de marzo la tasa de intervención hasta el 14,25% y se espera que en próximas reuniones siga incrementando el precio del dinero. Desde el pasado septiembre los tipos han aumentado en 3,75 puntos. La Bolsa brasileña encaja por tanto medidas antiinflacionistas que perjudican la financiación empresarial y ajustan las valoraciones de las cotizadas. Sin embargo, esta visión tiene su contrapunto entre los expertos de JPMorgan: “Nuestro escenario es que las tasas alcancen un máximo del 15,25 % en junio, pero con el reconocimiento de que podría materializarse una pausa anticipada. En nuestra opinión, esto debería ser un claro catalizador para las acciones, ya que las perspectivas de recortes de tasas deberían comenzar a considerarse casi de inmediato”, explican.
Los expertos de este banco estadounidense acaban de cambiar su posición del mercado brasileño de neutral a sobreponderar. Además del horizonte del fin de la subida de los tipos, destacan que “el escenario global ahora beneficia a Brasil (siempre que EE UU no entre en recesión), y el repunte de China debería atraer más recursos a los mercados emergentes, probablemente beneficiando a socios comerciales de China como Brasil. Por último, pero no menos importante, las elecciones de julio de 2026 están lejos, pero aportan un elemento de atractivo, aunque el riesgo de aquí a allá es considerable”, indican. Los bancos y los servicios públicos tradicionales son las apuestas más claras de JPMorgan.
Los expertos ven cercano el fin de la subida de tipos, que este marzo marcaron el 14,25%
En esta misma línea Pablo Riveroll, responsable de análisis de mercados emergentes de Schroders, considera que entre los emergentes, “el país más interesante es Brasil, donde las valoraciones están extremadamente bajas en renta variable y también de su divisa debido a la subida de los tipos de interés y a la preocupación de un ciclo inflacionario que no estaba previsto. Pero estamos llegando al final de ese ciclo de subidas de tipos de interés. Además, los mercados están descontando un escenario político probablemente muy positivo en 2026. Por todo ello, estamos optimistas en Brasil”.
Otro factor positivo es la mejoría de su divisa, el real brasileño. En el año se ha revalorizado frente al dólar y el euro, tras el duro ajuste del pasado año. Frente a la moneda comunitaria, el euro, ha ganado un 3,4% hasta los 6,16 reales por euro, mientras que, en relación con el dólar, la revalorización ha sido del 6,6% y ahora el cambio es de 5,76 reales por dólar frente a los 6,17 de cierre del pasado ejercicio.
Mali Chivakul, economista de mercados emergentes en J. Safra Sarasin Sustainable, considera que “un dólar estadounidense más débil en lo que va de año ha servido de apoyo al real y al mercado bursátil. Esperamos que el dólar continúe debilitándose, lo que debería seguir proporcionando apoyo. Aun así, los elevados tipos de interés nacionales probablemente mantendrán los fondos locales en el mercado de renta fija. Se necesita una mayor rotación de fondos extranjeros hacia los mercados emergentes para impulsar todavía más la renta variable brasileña”, indica. Son también buenas noticias para las firmas del Ibex 35 como Banco Santander, Mapfre o Telefónica, que obtienen gran parte de sus beneficios e ingresos en este país. Así, en torno al 20% del beneficio de Santander se genera en Brasil, país que se consolida como el segundo mercado para Mapfre tras la buena evolución de su acuerdo con el Banco do Brasil. En el caso de la teleoperadora, su filial Vivo destaca por su incremento de ingresos.
Brasil aparece como favorito frente a México según la encuesta de Bank of America a los gestores de fondos
Una reciente encuesta de Bank of America (BoFa) sobre los mercados latinoamericanos realizada sobre 33 gestoras apunta que el porcentaje de gestores de fondos que prevé que Brasil supere el rendimiento de otros mercados latinoamericanos, como México, aumentó en marzo, superando el 60%, frente a casi el 45% del mes pasado. El estudio también destacó que el sector financiero y las concesiones públicas siguen siendo las áreas donde los gestores mantienen las posiciones más sobreponderadas.
Incógnitas
La política arancelaria de Trump es sin duda una de las grandes incógnitas para Brasil, aunque los expertos opinan que sus efectos serán inferiores a los que sufrirán otras economías de la zona. El economista de Capital Group, Tryggvi Gudmundsson, considera que “las nuevas políticas de la administración Trump podrían tener más consecuencias geopolíticas que comerciales en el caso de Brasil. Recientemente, Trump amenazó con la imposición de aranceles a los países BRIC (Brasil, Rusia, la India y China) si estos deciden optar por una nueva divisa que sustituya al dólar estadounidense. En el ámbito comercial, la economía brasileña es relativamente cerrada, por lo que se vería menos afectada por las políticas de Trump”. Una visión que también comparten los analistas de JPMorgan.
El ajuste presupuestario sigue como talón de Aquiles de la economía brasileña
Pero la clave estará en el ajuste presupuestario. Mali Chivakul indica “que persiste el riesgo de que los planes fiscales vuelvan a decepcionar. La aprobación del presupuesto la semana pasada no tuvo impacto en el mercado, pero la próxima prueba será la aprobación por el Congreso de la reforma del impuesto sobre la renta. Se supone que será neutral en cuanto a los ingresos, pero si el Congreso no aprueba las medidas de compensación, es probable que el mercado vuelva a decepcionarse”, concluye. Así, el futuro económico del país dependerá en gran medida de la capacidad del gobierno para generar estabilidad fiscal y política. Los inversores, aunque optimistas seguirán cautelosos, esperando señales claras de recuperación.