Pagar 7,2 millones de dólares por una estampa ‘vintage’: los cromos como producto de inversión en EE UU
El mercado secundario de los cromos deportivos en Estados Unidos es el mayor del mundo, y en 2022 dio más rentabilidad que el S&P 500
Olvídese de las tecnológicas, del Bitcoin, o de las acciones meme. Un cromo de Michael Jordan del año 1986 es una alternativa de inversión que puede competir con un fondo cotizado ligado al S&P 500. Inversores y coleccionistas por igual se subieron en 2020 a la ola de la fiebre por las pegatinas vintage y transformaron lo que era un pasatiempo infantil en una clase de activos alternativa. Ese año, la venta de estas estampas se disparó en un 142% en la plataforma eBay. Hoy en día, este mercado ha salido definitivamente del patio del colegio y ha llegado a las grandes casas de subastas como Sotheby’s, donde un cromo exclusivo puede generar una millonada para los más afortunados.
El mercado secundario de los cromos deportivos en EE UU es el mayor del mundo, y en 2022 el índice PWCC 500, que rastrea el comportamiento de las ventas de tarjetas coleccionables deportivas emitidas antes de 2000, dio más rentabilidad que el S&P 500. Pero el negocio, en todo caso, se ve muy distinto en cada orilla del océano Atlántico. En España es un entretenimiento informal. Sus epicentros en Madrid están en el Rastro o la Plaza de Quintana, donde, cada domingo, un centenar de personas —entre ellos niños en camisetas del Real Madrid, abuelos y también frikis coleccionistas— se reúnen con sus libretas llenas de estampas para vender e intercambiar sus jugadores favoritos. Los fichajes estrella suelen ser los mismos cada semana, los gigantes del mundo futbolístico: Messi, Ronaldo, o Mbappé, y en casos más raros, una vieja tarjeta de Pelé o Maradona. En la plataforma eBay se pueden pedir poco más de 59 euros por una figurita de Vinícius Júnior.
No es así en EE UU y en el resto de Norteamérica, donde la inversión en un jugador se ha convertido en un negocio con movimientos de más de seis dígitos, y cuyo éxito ha despertado el interés de los gigantes de la inversión como Blackstone. En 2021, el fondo adquirió Certified Collectibles Group, una de las siete principales firmas de autentificación de estos activos. El proceso de verificación, clave en la compraventa, es largo y exhaustivo, según explican fuentes del sector a CincoDías. Estas firmas califican los cromos en bruto sobre una escala de diez, basado en cuatro factores principales: centrado, esquinas, bordes y superficie.
Los grandes ganadores en este juego no suelen ser las estrellas futbolísticas sino las leyendas del baloncesto o los pesos pesados del béisbol: la cara de Honus Wagner, un jugador de los Pittsburgh Pirates en 1909, se vendió en Goldin Auctions por 7,2 millones de dólares (6,6 millones de euros) en 2022. En las subastas semanales en Goldin Auctions, entre los cromos más caros siempre figura uno de Mickey Mantle, el mítico jugador de los New York Yankees. La semana pasada obtuvo 33 pujas de hasta 4.500 dólares (4.156 euros). Esta imagen de 1952 se considera como un barómetro para el mercado, y no ha perdido valor en los últimos cuatro años, según la consultora de coleccionismo Altan Insights.
Algunos cromos tienen tanto valor que intermediarios como JM Bullion, un prestamista online de oro y plata, han empezado a permitir a sus clientes utilizar los cromos como garantía a la hora de obtener un préstamo. También está Alt Lending, un servicio ofrecido por el mercado de cromos Alt XYZ que te permite pedir prestados un mínimo de 10.000 dólares (9.235 euros) contra tus cromos. Para poder optar al préstamo, los cromos deben ser verificados por Professional Sports Authenticator o Beckett Grading Services.
Panini y Fanatics: dos caras del cromo
Solo dos compañías tienen cartas en el asunto de las estampas. La italiana Panini ha dominado el mundo de los cromos de fútbol españoles desde 1961, pero en EE UU ha surgido, en pocos años, un competidor gigante, Fanatics. Este rival con sede en Florida ha logrado acaparar las licencias de la NBA, de la liga del fútbol americano (NFL), así como la del béisbol, la MLB, en solo un par de años. El éxito de Fanatics ha colocado a su consejero delegado, Michael Rubin, en el club de los más ricos en el Bloomberg Billionaires Index.
Lluís Torrent, que lleva desde 1979 al frente de Panini España, aclara a este periódico que el mercado europeo no tiene nada que ver con el norteamericano. En 2023, la empresa logró facturar en los 100 millones de euros y vendió 41 millones de sobres de sus estampas de LaLiga. No obstante, el ejecutivo no ve valor en el cromo como clase de activo: “Desde el punto de vista europeo, es una solemne tontería; no le damos ninguna importancia. Estamos hablando de 41 millones de sobres. ¿Cuántos cromos de Vinícius están esparcidos por la geografía española?”.
Panini, al calor de la fiebre inversora en Estados Unidos, intentó entrar en el negocio de inversión hace tres años, lo que Torrent considera como “un verdadero fracaso” para la empresa. “El cromo históricamente nace en Europa. Y Europa tiene una forma de ser que no tiene nada que ver con el producto norteamericano”.
No obstante, el mercado de los cromos deportivos al otro lado del charco no es el mismo que durante su bum en 2020. El Card Ladder 50, el índice que mide el precio de 50 de las tarjetas más valiosas, se ha desplomado en un 12% en los últimos tres meses. Además, las ventas de seis dígitos son cada vez más escasas; se hundieron en un 55% en 2023, según Altan Insights. En las entrañas de los foros sobre cromos, un usuario de Reddit, que se identificó como un banquero corporativo, confesó su intención de dejar la banca y vender cromos en línea, y otro usuario le contestó: “No podrías haber escogido un peor momento para vender cromos. El mercado está en declive cada semana, y lo vas a pasar mal”.
Sigue toda la información de Cinco Días en Facebook, X y Linkedin, o en nuestra newsletter Agenda de Cinco Días