Las recetas de Ibercaja para invertir en 2025: plazos más largos, deuda corporativa y más fondos mixtos
La firma quiere acompañar a sus clientes para que se animen a asumir más riesgos
Ibercaja se ha convertido en el banco español que más ha apostado por los fondos de inversión. Los clientes de la entidad tienen un 54% de los ahorros “fuera de balance”, es decir, en productos que no son depósitos y cuentas bancarias, sino fondos de inversión y planes de pensiones. Se trata de la única gran entidad financiera que rebasa el 50%, gracias a una estrategia de largo alcance a favor de este modelo. Esto se aprecia también en las cifras. Hace tan solo dos años Ibercaja Gestión administraba fondos por valor de 15.000 millones de euros, mientras que en 2024 va a cerrar con más de 25.500 millones. Un incremento de más de 10.000 millones en menos de dos ejercicios.
Luis Miguel Carrasco, máximo responsable de Ibercaja Gestión, reconoce que “el camino que hemos recorrido con nuestros clientes ha sido increíble, algo único en España, incluso en Europa, pero queremos más”. Desde el anterior plan estratégico el banco aragonés tiene muy claro que tenía que ayudar a su clientela a dejar atrás el ahorro únicamente a través de cuentas corriente e imposiciones a plazo fijo, para irles animando a contratar otros productos.
El éxito de esta política con clientes ha sido evidente. La entidad lleva dos ejercicios acaparando más del 10% de las nuevas suscripciones en fondos de inversión, cuando su cuota de mercado en otros productos, como las hipotecas, no llega ni al 4%. “Año a año vamos arañando cuota en fondos y, sobre todo, ofreciendo unos excelentes productos y rentabilidades a nuestros clientes”, subraya Carrasco.
Para este fuerte impulso ha sido fundamental el entorno de la política monetaria. Después de casi una década de tipos cero, las subidas del precio del dinero iniciadas en 2022 han propiciado un contexto en el que los inversores más conservadores han podido lograr rentabilidades de entre el 4% y el 5% asumiendo riesgos mínimos. Lili Corredor, directora general de Ibercaja Gestión, recuerda que esta situación “ha sido un remanso ideal para animar al ahorrador tradicional a meter dinero en fondos, pero ahora hay que ir evolucionando”.
El ciclo de política monetaria ha sido esta vez muy rápido. Los tipos subieron rapidísimamente y, después de tan solo un par de trimestres, con la inflación ya controlada, ahora tanto el BCE como la Reserva Federal de Estados Unidos, han empezado a bajar tipos. “En este contexto, nosotros vamos a intentar que nuestros clientes empiecen a invertir ahora en fondos que tienen plazos más largos. Hasta ahora, la parte corta de la curva era muy atractiva, pero ahora vemos que hay más valor en la parte larga”, apunta Luis Miguel Carrasco.
Además de pasar el dinero de fondos de renta fija a corto plazo a otros con más duración, desde Ibercaja Gestión también confían en que los clientes empiecen a asumir más riesgos. “Creemos que 2025 va a ser un año donde van a funcionar bien los fondos mixtos y los perfilados, que tienen Bolsa y renta fija”, relata Corredor. Ahora, este tipo de productos tiene muy poco peso de renta variable, pero en esas carteras poco a poco irá aumentando el riesgo. “En 2025 la renta variable va a ser la estrella de nuestras carteras”, detalla Beatriz Catalán, directora de inversiones para Ibercaja Gestión.
En los fondos puros de renta fija, desde Ibercaja Gestión están rotando las carteras desde la inversión más pura en deuda soberana, hacia un mayor peso en deuda emitida por empresas de gran calidad crediticia. Otra forma más de meter una marcha más para los clientes de la firma.
A un año de rentabilidad, a tres años de rentabilidad, tanto para perfiles conservadores como para perfiles más audaces, “hemos sido más rentables que todas las firmas con las que nos comparamos”, subraya Luis Miguel Carrasco. También han cosechado buenos resultados con los contratos de gestión de cartera.
La gestora de fondos de Ibercaja va a terminar el año con captaciones netas por encima de los 1.500 millones de euros. La firma lleva cinco ejercicios ya con un flujo constante de entrada de dinero. Uno de sus proyectos para 2025 es lanzar los primeros fondos alternativos, que invierten más allá de las acciones y los bonos. Una tendencia muy fuerte en el sector.
Para Carrasco, el movimiento que quieren lograr de sus clientes —más duración, más renta fija privada, más riesgo, más Bolsa— “se va a poder hacer de forma muy natural, porque nuestros clientes conservadores están muy satisfechos con los resultados que han conseguido; están contentos, se han acostumbrado a este producto y están abiertos a escucharnos con nuevas opciones”.