Los caramelos ‘made in Spain’ triunfan en el mundo
El 55,2% de la producción se destina a la exportación, siendo EE UU el país de mayor demanda. El sector recupera niveles anteriores a la pandemia
España es un país de dulces que gusta, y mucho, a los extranjeros. Los últimos datos publicados por Produlce indican que la facturación del sector, que engloba turrones y mazapanes; pastelería, bollería y panificación; galletas; cacao y chocolate, y caramelos y chicles, mantuvo los volúmenes de 2021 a pesar del repunte de la inflación y la tensión de los tipos de interés, que han afectado al bolsillo de los consumidores. Así, la facturación alcanzó los 6.757 millones el pasado ejercicio, llegando a marcar un nuevo récord de exportaciones, cerca de los 2.000 millones.
La categoría más sobresaliente fue la de chicles y caramelos, que aumentó su peso sobre el total de los ingresos hasta el 17,2% (1.163,4 millones) y un 19,2% en términos de volumen (305,3 toneladas). Además, las ventas de este segmento fuera de España llegaron a los 641,7 millones de euros, un 31,2% más (218.800 toneladas), situándose como las de mayor exportación, con el 55,2% de la producción; el 43,6% es demanda interna y el 1,2% es importación.
Los principales países que más compran caramelos españoles son Estados Unidos, con el 27,3% del total de las exportaciones, Francia (12%), Alemania (10,4%), Reino Unido (7%), Italia (5%) y Portugal (4,5%). Por su parte, importamos caramelos y chicles principalmente de la UE (91,2%), Asia (5,9%) y América (2,4%).
Sobre el balance del último ejercicio, Rubén Moreno, secretario general de Produlce, destaca que “la categoría de caramelos por fin consigue recuperarse de la fuerte caída que conllevó la pandemia, y lo hace alcanzando una cifra de ventas un 11% superior a la de 2019, aunque la de chicles aún queda un 11% por debajo de los niveles pre-Covid”.
En cuanto a las diferencias entre demanda interior y exterior, Moreno explica que “durante la crisis sanitaria, en especial con el cierre de los establecimientos pertenecientes al canal impulso, se detectó una caída muy acuciada en el mercado nacional de este tipo de productos. De este modo, con este entorno, la mirada al exterior ha sido tanto un ejercicio de competitividad como una necesidad”.
En este mismo sentido se expresa José Ramón Pastor, director comercial y de marketing de Vidal Golosinas. “Sabemos que nuestro futuro está ligado a la expansión internacional y todos nuestros planes estratégicos incluyen medidas que nos permitan seguir creciendo a nivel global; las exportaciones suponen hasta un 80% de nuestra facturación”. Esta compañía cuenta con unas instalaciones que superan los 210.000 metros cuadrados en Molina de Segura (Murcia), inició su actividad en 1963 y comenzó a vender en el exterior a comienzos de los 70. En la actualidad, su capacidad supera los 75 millones de unidades al día y los productos de mayor éxito a nivel nacional e internacional son los caramelos de gelatina, los marshmallows, el regaliz y los geles dulces, que suponen el 80% de su catálogo.
La celebración de Halloween ha duplicado las ventas de productos temáticos en los últimos siete años
Mientras, Produlce confirma que los caramelos blandos son los de mayor éxito a nivel general y que el aterrizaje de celebraciones como Halloween están dando impulso al consumo. “Las ventas de productos temáticos en España en la semana de Halloween se han llegado a duplicar en los últimos siete años, concentrando en torno al 10% de la facturación anual en varias empresas del sector del caramelo en España; 7 de cada 10 kilogramos son vendidos fuera de nuestro país”, comenta Rubén Moreno.
En cuanto a los productos más típicos de las celebraciones que se avecinan, los turrones y los mazapanes, ocurre lo contrario, el 79,4% se consume en España (casi todo en Navidad) y el 20,6%, en países del exterior, principalmente Francia, Italia, Portugal, Estados Unidos y Países Bajos.
Compromiso con el clima y la dieta saludable
Innovación. Las compañías fabricantes de caramelos y dulces están comprometidas con la sostenibilidad y el medio ambiente, así como con los estándares de un menor consumo de azúcares y un cliente cada vez más exigente. El pasado año, el gasto se concentró por este orden: ampliación de la gama o catálogo, reformulación, innovación radical, rediseño y extensión de la marca. “La tendencia de los productos veganos sigue estando al alza, por lo que seguimos añadiendo nuevas referencias a nuestra marca Naturall, que ya cuenta con más de una decena de golosinas libres de componentes de origen animal y con un mayor porcentaje de zumo de frutas, que no contienen gluten ni colorantes y aromas artificiales”, explica José Ramón Pastor. Por otra parte, la mayor parte de las empresas lleva a cabo acciones para minimizar los desperdicios alimentarios, diseñar embalajes sostenibles y utilizar materiales reciclados y energías de fuentes sostenibles.
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