La industria y el empuje exportador sostienen el crecimiento gallego
Las previsiones estiman un alza anual del 2,8% en el primer trimestre de 2025. El sector exterior y una industria diversificada respaldan la tendencia


Galicia se mantiene firme. La combinación de tradición industrial y apertura al exterior ha permitido a la comunidad consolidar una senda de crecimiento con automoción, textil y pesca como ejes clave. La incertidumbre global apuntala una previsible desaceleración y la falta de relevo generacional tensiona la sostenibilidad del modelo.
Sin embargo, la región gallega mantiene el tipo con una subida del 2,8% del PIB en el primer trimestre de 2025, frente al mismo periodo del año anterior, según estimaciones del Instituto Gallego de Estadística (IGE). Este aumento se mantiene en línea con la media nacional, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).
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Una de las razones del buen comportamiento de la economía gallega es la diversificación. Pese a la importancia histórica del sector primario, la industria se ha convertido en el armazón del PIB. Este sector cerró el primer trimestre de 2025 con un alza del 10% respecto al mismo periodo de 2024, según el IGE. Le siguen construcción (6%), agricultura, ganadería, silvicultura y pesca (5,6%) y servicios (4,7%).
La tasa de desempleo se situó en el 8,8% hasta marzo de este año, frente al 10,45% registrado en 2024
Sin embargo, el incremento industrial muestra ritmos dispares entre actividades, matiza María Bastida, doctora en Organización de Empresas y profesora de la Universidad de Santiago. “La automoción mantiene un peso relevante gracias al dinamismo del clúster de Vigo, mientras que el naval sigue condicionado por la falta de relevo generacional y cierta volatilidad en la contratación”, señala Bastida.
Galicia se aferra, por tanto, al comercio internacional como palanca de expansión. Las ventas al exterior representan el 42,8% del PIB regional, 14 puntos por encima de la media española (28,9%) y solo por detrás de Navarra (47,4%), recoge CaixaBank Research en su último informe publicado en noviembre de 2024. Con todo, superó el pasado año su máximo histórico de exportaciones con un volumen de 31.079.520 euros. Por sectores, destacan la automoción (29%) y el textil (23%), según el IGE.
Pese a que la región mantiene una dinámica estable, el Foro Económico de Galicia advirtió este mes en la presentación de su Anuario 2025 de la “ligera desaceleración” que se está produciendo en la comunidad. El indicador Abanca-Foro de Coyuntura Económica de Galicia registró en abril un alza interanual del 3,1%, lo que confirma la ralentización desde que el 3,5% en noviembre, según recoge el informe. Se espera, por lo tanto, un comportamiento similar al estatal o ligeramente por debajo en un año influido por “factores globales que incrementan la incertidumbre en el ámbito económico y político”, según los economistas.
Desafíos
En paralelo, el empleo evidencia el crecimiento. Galicia cerró el primer trimestre de 2025 con una tasa de paro del 8,8%, frente al 10,45% registrado en el mismo periodo del pasado año, de acuerdo con el INE. La afiliación alcanzó 1.102.651 personas en junio de 2025, un 1,6% más que el mismo mes de 2024. “El empleo crece de forma generalizada en las principales provincias, en las grandes ciudades y en todos los sectores productivos, especialmente en aquellos vinculados a la industria, el sector primario y la construcción”, apunta Bastida.
La región se desarrolla, pero no escapa a desafíos estructurales como el envejecimiento de su población. Es la segunda comunidad autónoma con mayor índice de mayores (224%) por detrás de Asturias (257%), y alrededor del 26% de sus habitantes son mayores de 65 años, recoge INE. “El declive demográfico condiciona el presente y compromete el futuro económico de la comunidad”, advierte María Bastida.
Las ventas al exterior suponen el 42,8% del PIB regional, una cifra superior a la media española (28,9%)
Este desgaste acentúa el frenazo del relevo generacional. El IGE estima que solo entran al mercado laboral 23 jóvenes menores de 25 años por cada 100 personas mayores de 55 que están a punto de abandonarlo. La misma institución calcula que la comunidad ha perdido 21.000 personas en edad de trabajar en los últimos seis años. Una consecuencia directa, según Bastida, es la pérdida de mano de obra cualificada. “Más de 12.000 vacantes quedaron sin cubrir en 2024, muchas en sectores estratégicos que requieren perfiles técnicos y formación STEM”.
El Gobierno autonómico está impulsando estrategias de viabilidad económica y atracción laboral. Por ejemplo, en el pesquero destacan las medidas para mejorar la rentabilidad y la incorporación de nuevos trabajadores, mientras que en el agrario se exploran fórmulas para traspasar explotaciones en ausencia de vínculos familiares, cita Bastida. “Tiene capacidad de reacción si es capaz de activar políticas valientes en tres frentes clave: el fomento de la natalidad, la atracción y retención de talento y un gran pacto formativo que conecte las necesidades del mercado con una oferta educativa ágil, flexible y orientada al futuro”, resume.
Oportunidades
Renovables. En 2024, el 84,6% de la electricidad generada en la comunidad procedió de fuentes renovables, según Red Eléctrica. Sin embargo, el potencial verde en Galicia está retenido por la “judicialización de proyectos que han generado desconfianza entre inversores, operadores y financiadores“, apunta María Bastida, doctora en Organización de Empresas y profesora de la Universidad de Santiago. La región debe abrir el debate y apostar por la sostenibilidad como oportunidad de futuro industrial, territorial y social, según la docente: “Cuenta con condiciones privilegiadas para ser un motor de la transición energética”, sostiene.
Innovación. La comunidad gallega mantiene una potente industria forestal, lidera la producción láctea y gana peso en sectores como la conserva y el vino. La innovación es clave para potenciar estas actividades históricas en la región, cree Bastida. “La tradición, lejos de ser una limitación, es un activo diferencial que se traduce en especialización y eficiencia”.
