El campo presenta signos de moderación en los precios con un ojo puesto en el petróleo
Un informe de CaixaBank Research destaca la competitividad del sector agroalimentario español a pesar del descenso de la producción, por encima de la media de la UE
Comienzan a verse los primeros brotes verdes de cara a la estabilización de los precios de los alimentos. Es, al menos, lo que se extrae de un informe agroalimentario realizado por CaixaBank Research, que señala a la reducción de los precios de los productos agrícolas en los mercados internacionales y de los costes de transporte como los responsables de que esto suceda. Buenas noticias, pero con matices. Por el momento, la inflación seguirá siendo elevada por el retraso con el que se transmiten este tipo de impactos sobre los precios. Además, si el alza del valor del petróleo se mantiene por encima de lo esperado, podría convertirse en un obstáculo más de cara a la ansiada moderación.
El centro de estudios también ha destacado el mantenimiento de la competitividad del sector a pesar de un marcado descenso de la producción en 2022 que, según estimaciones de la Comisión Europea, también se ha producido en 2023. Concretamente, el año pasado, la industria agraria registró una caída en volumen del 13,6%, muy por encima del conjunto de la Unión Europa, cuyo debilitamiento llegó al 4,6%. Detrás de esta problemática hay dos causas principales.
La primera, una sequía recurrente que afecta, sobre todo, al Mediterráneo occidental. El volumen de precipitaciones registradas en 2022 se situó en 533 mm, un 16% por debajo del promedio histórico, lo que afectó a las cosechas de forma generalizada, especialmente a los cereales y las frutas. A 31 de agosto de 2023, el 26% del territorio nacional se encontraba en una situación de sequía prolongada, a lo que hay que añadir unos pobres niveles de agua embalsada, que, a duras penas, llegan al 37% (la media de los últimos años es del 50%).
Por otra parte, el alza de costes, que aumentó en 2022 un 45,6% frente al promedio de la UE, que no pasa del 33%. La energía, los fertilizantes y, sobre todo, los piensos fueron los principales responsables del aumento de costes del sector agroalimentario. El elevado protagonismo de los piensos en nuestra estructura de costes: suponen el 54,4% del total de consumos intermedios (39,3% en la UE). Pese a todo, el agroalimentario sigue siendo uno de los principales sectores exportadores de la economía española y viene evolucionando mejor que la de sus principales competidores europeos.
Desde 2010, la cuota mundial en exportaciones agroalimentarias ha crecido 0,3 puntos Un hecho que CaixaBank Research destaca al compararlo con potencias como EE UU, que ha perdido en este periodo 0,8 puntos de cuota. Observando el top 5 de las potencias europeas, hasta junio de 2023, las exportaciones españolas ganan peso, al pasar del 10,9% en 2010 al 16,1%.
El sector agroalimentario representó en 2022 el 17,2% de las exportaciones totales en valor creciendo con fuerza tras la pandemia. Sin embargo, en volumen, suponen un 20,4%, un 5,5% menos que en 2022 y, hasta junio de 2023, un 9,1%. A pesar de ello, este descenso ha sido menos acusado que en los 5 mayores exportadores mundiales o en la media de la UE (-15,1%). Esta caída de las ventas españolas al exterior está siendo especialmente intensa (un 40% interanual en el primer semestre de 2023), en productos, como las semillas oleaginosas y los cereales, si bien es cierto que solo representan el 5,9% y el 2,5% de las exportaciones totales, respectivamente.
Sigue toda la información de Cinco Días en Facebook, X y Linkedin, o en nuestra newsletter Agenda de Cinco Días