Amper acelera su estrategia de adquisiciones mientras refuerza su capital con nuevos accionistas
La compañía prepara media docena de compras para defensa y energía tras la toma del 49% de Elinsa. El grupo ultima nuevas desinversiones
Amper ha acelerado en su estrategia de adquisiciones para el impulso de su plan estratégico, basado en dos negocios claves: seguridad y defensa, y energía y sostenibilidad. El grupo, que ayer comunicó la compra del 49% que no controlaba de su filial Elinsa, prevé destinar cerca de 90 millones a nuevas operaciones corporativas, que se ejecutarán especialmente durante 2025 y 2026.
Según explica su consejero delegado, Enrique López, la compañía realizará seis o siete adquisiciones en el segmento de defensa y seguridad, de las que tres o cuatro, incluso cinco, serán más grandes, mientras que las otras serán más pequeñas. La compañía sigue indicaciones del Ministerio de Defensa sobre los posibles proyectos para la inversión en empresas más pequeñas.
Con respecto al ámbito de las energías eólicas, donde la empresa tiene en marcha diferentes proyectos con socios como Navantia o Hitachi, también tiene pendiente cerrar una operación inorgánica para acelerar el crecimiento en este segmento de negocio.
La compañía está en marcha. Amper comunicó ayer la citada compra del 49% del capital de la filial Electrotécnica Industrial Naval (Elinsa), en una transacción valorada en 30,5 millones de euros, de los que un 50% se abonará en efectivo, con un calendario de pagos en tres años, y el restante 50% se pagaría mediante la emisión de nuevas acciones de Amper, que serán suscritas por los vendedores, en este caso, la familia Muñiz García, que pasará a ser uno de los principales accionistas, con el 6,79% del capital, y tendrá un representante en el consejo de administración.
De esta manera, Amper reforzará su capital. Como primer accionista permanecerá Zelenza, con un 8,6% de las acciones; la citada familia Muñiz García, con el 6,79%; José Luis Martinavarro, con cerca de un 5,3%; e Iñigo Resusta que, a través de distintos fondos y sociedades, representará a cerca de un 10%. Es decir, la empresa va a contar con un núcleo accionarial con cerca del 30% del capital. Además, según Enrique López, con alguna de las adquisiciones, que se llevará a cabo con una fórmula similar a la aplicada con Elinsa, entraría algún otro accionista de referencia, con algo más del 5% del capital.
Al mismo tiempo, Amper está acelerando las ventas de activos no estratégicos. La firma prevé vender el negocio vinculado a su mina de pizarra en los próximos días, mientras negocia la venta de su filial de servicios industriales. Dentro de sus planes, Amper prevé dar entrada a dos socios a su filial de eólica marina, uno financiero y otro industrial, que tomarían conjuntamente el 49% del capital, a través de una ampliación. Desde 2023, Amper ha vendido una filial en Colombia, así como la alemana Atlas Engineering, dedicada al despliegue de fibra. En su conjunto, Amper espera captar en torno a 20 millones de euros con las desinversiones.
El ejecutivo señaló también que Amper va a cumplir sus previsiones para 2024 incluidas en el plan estratégico, que pasan por alcanzar unos ingresos de 428 millones de euros, un ebitda de 35 millones, con una cartera de pedidos superior a 500 millones. “Podría acercarse a los 600 millones”, destaca. De cara a 2025, la previsión pasa por alcanzar unas ventas de 561 millones, con un ebitda de 58 millones, para superar los 1.000 millones en ingresos en 2026. López no descarta una revisión del guidance para el año que viene, si bien no se decidirá hasta la primavera del año que viene, cuando haya más visibilidad.
López defendió la reestructuración financiera realizada por Amper en los últimos años, desde su llegada al cargo a final de 2022, apuntalada en la ampliación de capital de 31 millones de euros realizada a final de 2023, las citadas desinversiones de activos y la reorganización de la deuda, que ha pasado en dos años de tener un 80% del total a corto plazo a tenerlo a largo plazo. El directivo recordó la emisión de deuda de 30,7 millones anunciada antes del verano, que ha supuesto la entrada de dos inversores de referencia, con 12 millones cada uno. La firma va a trabajar ahora en completar la transacción entre finales de noviembre y principios de diciembre con nuevos inversores.
El consejero delegado de Amper considera que la acción de la compañía empieza a estar en valores adecuados. Desde principios de año, los títulos se revalorizan cerca de un 30%, hasta el entorno de los 0,11 euros, que otorgan a la empresa una capitalización bursátil próxima a 165 millones de euros. El directivo recordó que la compañía ha llegado a contar con más de 15.000 accionistas en los últimos años, y debe trabajar ahora en convencer al mercado, para dejar atrás su vitola de ser uno de los “chicharros” de la Bolsa española. López descarta que la operación de Elinsa vaya a ser dilutiva para el accionista, al emitirse a un precio de 0,15 euros por acción (esto es, 0,05 euros de nominal y 0,10 euros de prima de emisión), por encima de los 0,11 euros en los que cotiza actualmente. “La dilución no es real, porque la acción va a tender a subir”, explica el directivo, quien añade que los nuevos accionistas que entran tras la operación de Elinsa ven potencial.
Indra y Trump
Amper cree que la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de EE UU impulsará el crecimiento del sector de la defensa. “Conceptualmente lo debería de mejorar”, según su CEO, quien recordó que fue el mandatario, en su anterior presidencia, entre 2016 y 2020, cuando se forzó a los países europeos a elevar su gasto en defensa hasta el 2% del PIB. De esta manera, el mercado de seguridad y defensa se va a acelerar y, en el caso de España, podría suponer que el gasto se doblará.
Con respecto a los negocios, el ejecutivo señala que tanto el negocio de energías eólicas como el de defensa y seguridad van a crecer a tasas de doble dígito en los próximos 20 años. López describe de “muy buena” la relación con Indra, indicando que son las únicas dos compañías españolas cotizadas del ámbito de la defensa. “Ambas empresas tienen estrategias muy complementarias”, dice. El directivo se abrió a posibles alianzas, si bien descartó una entrada en el capital de Indra, tal y como han realizado otros grupos como Sapa y Escribano. “No tiene sentido”, señaló el ejecutivo, quien definió a Indra como referente del sector en España.