¿Qué es el ghosting laboral y cómo debe enfrentarlo una pyme?
El mundo de las aplicaciones digitales no es el único en el que se puede sufrir la pérdida de un contacto
El ámbito romántico y personal no es el único lugar en el que las personas se pueden encontrar con el silencio como respuesta a la hora de relacionarse de forma online. Y es que en el mundo profesional también existe lo que se conoce como ghosting, y que afecta a la mente y la seguridad en uno mismo más de lo que a priori puede parecer.
Según un estudio realizado por Nexian, una empresa de selección de personal, más del 34% de los candidatos que se presentan a una oferta laboral, termina desapareciendo en el proceso de contratación, incluso en las últimas fases del mismo. No obstante, esta no es la única dirección del ghosting laboral, porque también está absolutamente normalizado el hecho de que sea la empresa la que prometa ponerse en contacto para dar una respuesta a la propuesta, y nunca llegue a hacerlo.
Averiguar diferentes maneras de que esta falta de comunicación se vuelva frecuente, es la clave para que tanto empresa como candidato se ahorren el mal trago de quedarse con la sensación de que nunca llegarán a saber si aquella era la oferta que cambiaría su futuro.
¿De dónde viene el término ghosting y cómo se aplica al ámbito empresarial?
El término ghosting empezó a extenderse en el momento en el que la tecnología entró y empezó a protagonizar algunos de los comienzos de las relaciones amorosas. Fue en las aplicaciones de citas, que desde hace algunos años son un canal absolutamente frecuente para conocer gente nueva.
Las cosas pueden salir, exactamente igual que en la vida real, bien o mal, pero lo que una persona nunca espera es que simplemente no se sepa cómo ha salido. Aquí es donde aparece este término, cuya traducción literal al castellano es "hacer el fantasma", es decir, desaparecer.
Y es que en medio de un proceso comunicativo, e incluso con citas presenciales entre medias, una persona simplemente decide dejar de contestar, sembrando todo tipo de dudas en la otra persona con la que se estaba relacionando, que nunca llegará a saber, ni siquiera, cuál ha sido el motivo de tal desaparición.
Si se traslada este mismo concepto al mundo profesional, es fácil entender cómo pueden suceder las cosas. Una empresa saca a la luz una oferta de trabajo, y uno o varios candidatos proponen sus currículum para intentar lograr el empleo. Pero, en un momento dado, una de las dos partes, toma la decisión de dejar de contestar para siempre a la otra, incluso cuando el proceso selectivo ya está bastante avanzado.
En el caso de las empresas, suele llegar en forma del clásico "ya le llamaremos". Muchas personas saben perfectamente que esto puede pasar, y por ello logran entender que, tras un periodo de tiempo prudencial, el silencio significa que no se ha superado el proceso. Sin embargo, cuando es el candidato el que, de repente, decide dejar de contestar a los mensajes, o no aparece en las siguientes citas del proceso o incluso el primer día de trabajo después de haber sido elegidos, las empresas no saben bien cómo actuar.
La clave del éxito para que el silencio no sea una respuesta
Los datos de Nexian con respecto a la cantidad de veces en las que sucede este ghosting laboral, son claros: muchas empresas argumentan que incluso a veces sucede que varios de los candidatos que eran favoritos para continuar en el proceso, desaparecen todos a la vez.
¿Qué se puede hacer para intentar evitar, a toda costa, esta clase de situaciones que no hacen más que alargar procesos y retrasar el ritmo de trabajo? Los expertos lo tienen claro, y hay algunas concesiones que la empresa puede hacer para que su oferta sea, siempre, lo suficientemente atractiva para que nadie quiera hacer ghosting:
- Por ejemplo, publicar con todo lujo de detalles cuáles son las condiciones, características específicas de las funciones, el horario, los extras, las vacaciones y, por supuesto, la compensación económica. Cuando no hay lugar a ningún tipo de duda sobre cómo va a desarrollarse el trabajo en el día a día, los candidatos que se presentan, tienen claro por qué quieren el puesto.
- Potenciar algunas características que todos los candidatos a un nuevo puesto de trabajo buscan, es otra de las formas de que nadie desaparezca. Según las estadísticas, la conciliación laboral y familiar es uno de los asuntos que más preocupan a cualquier profesional, sobre todo desde que se empezó a expandir la posibilidad del teletrabajo a raíz de la pandemia. Ofrecer este tipo de alternativas puede hacer que un candidato sueñe con el puesto, y no lo abandone en cuanto encuentre algo mejor.
- Por último, reforzar planes de beneficios a la hora de realizar trabajos extra, y dejarlo claro en la oferta laboral, también puede ser una motivación para que alguien siga todo el proceso selectivo con ganas, y no con desidia.
Sea como sea, el ghosting laboral es exactamente igual de incómodo y frustrante que el que sucede en el campo de las relaciones personales. Siempre habrá gente que actúe como no se debe, pero está en manos de las empresas, al menos en el mundo profesional, intentar poner impedimentos para que suceda.