Las dos caras del Black Friday: alivio para la gran superficie, lastre para el pequeño comercio
La distribución ve una buena ocasión para deshacerse de inventario
El Black Friday llega mañana ya consolidado como una fecha fija en el calendario de compras para el consumidor español. Ni siquiera la incertidumbre económica y la inflación hacen prever que la campaña, que ya ha comenzado en la mayoría de compañías de la distribución, se vaya a resentir, más allá de alguna previsión que apunta a unas compras más de última hora este año.
Estos días son decisivos, sin duda, para los grandes operadores, que entre noviembre y enero se juegan buena parte de su cuenta de resultados. El Corte Inglés, sin ir más lejos, reconocía en sus folletos de emisión de bonos que su pico de ventas se produce en esta fase final del año, tanto por la campaña de Navidad como por el mismo Black Friday. Según datos de Anged, la patronal de las grandes superficies, hasta un tercio de las ventas navideñas se realizan estos días, dependiendo de la categoría.
Sin embargo, esta cita comercial tiene una doble cara. Mientras la gran distribución le da la bienvenida, como fórmula para "estimular" el consumo, el pequeño comercio lo mira con más pesimismo. La avalancha de descuentos les deja sin mucho margen para pelear en precio con las grandes superficies, y todavía más en el momento actual. "Descartamos que de cara al Black Friday vaya a haber grandes promociones y descuentos agresivos, porque los comerciantes ya van muy al límite", explica Rafael Torres, presidente de la Confederación Española de Comercio. "Desde el comercio de proximidad llevamos desde hace meses rebajando márgenes y conteniendo precios, o repercutiéndolos con la máxima responsabilidad, intentando guardar un difícil equilibrio para no perder competitividad", añade.
Un escenario que contrasta, por ejemplo, con las previsiones de la gran distribución. Anged prevé un arranque de campaña navideña "positivo" gracias "al estímulo promocional y los descuentos especiales del Black Friday". La patronal de El Corte Inglés, Carrefour o Ikea dice que sus empresas están constatando una vuelta a la normalidad tras el Covid, que "está favoreciendo tanto las compras como una mejor operativa comercial, en cuestiones como logística, empleo y gestión con proveedores".
Poco margen
Además, añaden que el Black Friday ha alcanzado ya un "gran arraigo" en el comercio y en el consumidor. Aunque desde la pequeña distribución no comparten esta visión. "Desde CEC nunca nos hemos mostrado partidarios de jornadas como el Black Friday, ni de la dinámica actual de ofertas encadenadas a lo largo de todo el año", apunta Torres. "Creemos que todo lo que esté basado en descuentos fuera de la temporada de rebajas, que sí tienen su sentido para dar salida al stock acumulado, no beneficia al comercio", añade.
Una visión que, por ejemplo, siempre se ha compartido desde el pequeño comercio textil, sector donde abundan las campañas de descuento. Ahora es el Black Friday, pero en los últimos días también se ha celebrado el llamado Día del Soltero, importado de China. Desde la patronal Acotex no se esperan "descuentos agresivos", ya que "al comercio también se le han incrementado los costes de la luz, de las materias primas, de la logística, del alquiler, y no tiene margen suficiente para aplicar este tipo de descuentos". Los habrá, pero "livianos". Hay que tener en cuenta que en la primera semana de enero llegan las rebajas, una cita que desde hace años el pequeño comercio está pidiendo retrasar.
Sin embargo, en la gran distribución se apunta a la moda como uno de los sectores donde más ofertas se esperan para estos días, para "ayudar a recuperar las ventas de ropa de temporada que las altas temperaturas del otoño han retrasado". Los grandes operadores del sector vienen acumulando importantes stocks a los que deben dar cabida.
Si para el pequeño comerciante los descuentos suponen una mayor presión sobre su actividad, en el grande lo ven como "una buena oportunidad para estimular muchas compras que los consumidores han retrasado a la espera de mejores ofertas".
"Según la experiencia de años anteriores, esta campaña no cuenta con gran adhesión dentro de los comercios más pequeños y quienes sí se adhieren se ven en su mayoría arrastrados a hacerlo, para no perder las ventas frente a otros formatos, y no tanto porque les suponga un beneficio", resume el presidente de CEC.
Pese a todo, el Black Friday es una cita que interesa al consumidor. Según una encuesta elaborada por Aecoc, la patronal del gran consumo, el 64% de los consumidores se plantea comprar durante esta campaña de descuentos, mientras que un 36% nunca lo ha hecho ni lo hará este año.
La misma encuesta indica que ropa, calzado y accesorios son las categorías más buscadas, seguidas de informática, telefonía y electrodomésticos.
Eso sí, la acumulación de campañas de descuentos, como el ya mencionado Día del Soltero y el Cyber Monday, que el próximo lunes cogerá el testigo al Black Friday, puede suponer una "saturación del calendario", según el responsable del área de bienes tecnológicos de consumo de Aecoc, Óscar Jiménez.
Y a todo ello se suma un hecho inédito, como la celebración del Mundial de fútbol en plena campaña, lo que "puede generar una canibalización en los result
La OCU y Facua alertan de falsas rebajas estos días
Mala práctica. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) denunció este miércoles que el 99% de las rebajas que se anuncian durante la campaña de Black Friday “no son reales”. La asociación ha elaborado un estudio en el que, desde el 19 de octubre, compara 16.000 precios online de productos de electrónica y electrodomésticos. En él concluye que salvo “contadas excepciones”, el número de productos rebajados “está siendo mínimo, alrededor del 2%” y que “el descuento medio del 25% anunciado supone en realidad una subida media del 3% respecto al precio mínimo de los días previos”. Una mala práctica, denunció la OCU, que es posible por el “reiterado incumplimiento de la actual normativa de comercio”. El artículo 20.1 de la Ley 7/1996, de Ordenación del Comercio Minorista, establece que “siempre que se oferten artículos con reducción de precio deberá figurar con claridad el precio anterior junto al precio reducido”.
Consumidores. Por su parte, un sondeo realizado por Facua-Consumidores en Acción arroja que solo el 1,6% de los encuestados cree que “ningún comercio falsea descuentos”, y que el 83% señaló que la “gran mayoría de empresas ofertan falsos descuentos en muchos artículos”.