¿Qué son las prestaciones no contributivas y a cuáles puede acceder un autónomo?
Son las prestaciones para quienes no hayan obtenido los mínimos de cotización para cobrar una prestación
Las prestaciones no contributivas son aquellas que se conceden aunque no se hayan obtenido los mínimos de cotización que establece la ley para cobrar una prestación.
Los expertos de Billin aseguran que los autónomos pueden acceder a las prestaciones no contributivas cuando no tengan el mínimo de cotización exigible para acceder a las prestaciones contributivas.
Estas prestaciones se conceden aun cuando el autónomo no ha cotizado nunca o no lo haya hecho durante el tiempo necesario para alcanzar las prestaciones del nivel contributivo.
Así, las prestaciones no contributivas a las que puede acceder el autónomo son la de invalidez y la de jubilación. Estas prestaciones las gestionan los órganos competentes de cada comunidad autónoma, así como las direcciones provinciales del Instituto de Mayores y de Servicios Sociales.
Prestación de invalidez y de jubilación
Para acceder a la prestación no contributiva de invalidez, deberá presentarse la solicitud en las oficinas de los Servicios Sociales de las Comunidades Autónomas, del Imserso o en cualquier otra de la Seguridad Social. Deberá facilitarse el impreso correspondiente para poder tramitar la prestación.
La cuantía anual íntegra de la prestación no contributiva por invalidez es de 5.899,66 euros al año y de 421,40 euros al mes. Si no se accediera a la prestación completa y se accediera a la mínima del 25%, la cuantía será de 1.474,90 euros anuales y de 105,35 euros al mes. También se podrá acceder a la prestación íntegra más el 50%, lo que será de 8.849,40 euros anuales y de 632,10 euros mensuales.
Los autónomos también podrán acceder a la prestación no contributiva por jubilación. En este caso, el importe anual íntegro será de 5.899,60 euros y de 421,40 euros al mes. Si no se accediera a la prestación de manera íntegra, se podría acceder a la prestación mínima del 25%, que será de 1.474,90 euros anualmente y de 105,35 euros mensualmente. Esta prestación deberá solicitarse en los mismos sitios que la prestación no contributiva por invalidez.