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La celulosa y su papel en la bioeconomía circular

Ence suministra productos sostenibles sustitutivos de las fibras sintéticas

Celulosa de la línea Ence Advanced.
Celulosa de la línea Ence Advanced.

La conciencia ambiental se ha convertido en un es­tímu­lo en la búsqueda de una economía verde y limpia. La denominada bioeconomía circular que, según la FAO, utiliza “recursos biológicos renovables con el fin de reemplazar los combustibles fósiles y producir alimentos, piensos animales y otros productos biológicos”.

Dentro de esta última categoría se enmarca la actividad de Ence, empresa líder en Europa en la producción de celulosa de eucalipto, que trabaja la sostenibilidad a lo largo de todo el proceso. Aprovechando la madera y biomasa de su entorno, demostrando autosuficiencia energética en las plantas de Pontevedra y Navia (Asturias), generando su propia energía renovable para su proceso a partir de la lignina y los restos forestales, desarrollando una actividad alineada con el desarrollo rural y la transición ecológica, y facilitando un consumo más sostenible con sus artículos de origen natural, alternativa presente y futura a las fibras sintéticas.

Ence Advanced es la plataforma de productos desde donde la compañía suministra Naturcell, una pasta de papel no blanqueada. Desarrollada de acuerdo con los criterios más innovadores y exigentes en materia de sostenibilidad, se caracteriza por su menor huella de carbono, su mejor aprovechamiento de la energía y la reducción del consumo de agua en su producción.

Hacia otro modelo de consumo

De la misma línea son Powercell, celulosa de fibra corta de gran resistencia, y Closecell, celulosa de baja porosidad. Ambas permiten múltiples aplicaciones para poder ser una opción sostenible frente al uso de plásticos, como bolsas y embalajes o recipientes flexibles para alimentos y bebidas.

De la orientación de Ence hacia un modelo de producción y consumo más responsables nace el acuerdo con PackBenefit, empresa especializada en la elaboración de envases ecológicos. Esta alianza ha permitido lanzar al mercado bandejas para uso alimentario elaboradas con fibras naturales. Fácilmente reciclables, como la celulosa, de origen natural, se están convirtiendo en un sustitutivo eficaz y seguro a un material procedente del petróleo con un alto impacto medioambiental.

Menos plástico

Por su versatilidad y sostenibilidad, la celulosa es uno de los materiales del futuro. Reciclable, biodegradable y compostable, está en condiciones de acabar reemplazando al plástico.

La compañía destaca que sus “bioproductos, junto con la bioenergía, son capaces de mejorar el modelo de consumo actual y generar nuevas oportunidades de actividad y empleo en el territorio, y todo ello a partir de la bioeconomía circular”.

Volviendo al principio, la actividad de Ence conecta de nuevo con la definición de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura: “Su carácter transversal ofrece una oportunidad única para abordar ampliamente problemas sociales conectados entre sí, como la seguridad alimentaria, la escasez de recursos naturales, la dependencia de los recursos fósiles y el cambio climático, logrando al mismo tiempo un desarrollo económico sostenible”.

Biofábrica Ence en Navia (Asturias).
Biofábrica Ence en Navia (Asturias).

Beneficios compartidos

El leitmotiv de Ence es la sostenibilidad, presente en el uso responsable de los recursos naturales y a lo largo de todos los procesos de producción, con origen en el monte y destino en el producto final, ya sea energía verde o celulosa. Desde la compañía defienden que, garantizando el respeto por el medio ambiente, se establece un beneficio mutuo en las relaciones con proveedores, propietarios forestales, agricultores, clientes y resto de grupos de interés, y se genera valor en el entorno de sus plantas.

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