¿Cuánto subirán las hipotecas en abril tras entrar el euríbor en positivo?
El pasado día 12 el índice hipotecario por excelencia volvió a tasas positivas después de seis años y la media mensual podría rozar el cero
El euríbor a 12 meses, principal índice de referencia para calcular las cuotas de las hipotecas a tipo variable, está subiendo con fuerza al calor de la posible subida de los tipos oficiales de interés y el pasado 12 de abril cotizó en positivo por primera vez en seis años. Marcó el 0,05% en tasa diaria y después de bajar al -0,014% al día siguiente, el jueves 14 repuntó de nuevo hasta el 0,03%. Tras permanecer cerrados los mercados el viernes y el lunes por la Semana Santa, ayer martes cayó al -0,010%. La media provisional del mes de abril se sitúa en el -0,025% frente al -0,484% de hace justo un año. Fuentes del mercado estiman que el indicador podría cerrar el mes alrededor del -0,02%. Esto significa que los préstamos hipotecarios que se revisen este mes sufrirán ya una importante subida de las cuotas, de entre unos 300 euros a 600 euros de media al año.
Las hipotecas se revisan una vez al año o al trimestre. "Ese día, el banco toma el último valor publicado del euríbor para calcular el interés que se aplicará hasta la siguiente actualización. Así, si el euríbor ha subido respecto a la anterior revisión, el interés será más alto y el hipotecado pagará unas cuotas más caras. En cambio, si baja, se aplicará un tipo más bajo y las mensualidades se abaratarán", explican desde el portal financiero HelpMyCash.
Para una hipoteca media de 150.000 euros con un plazo de 25 años y un interés de euríbor más un diferencial del 1%, tomando la media mensual estimada del -0,02%, la letra pasará de 533 euros al mes a 564 euros al mes, lo que supone 368 euros más al año.
En el caso de un montante medio de 200.000 euros, la cuota mensual se incrementará de los 711 euros a los 752 euros, es decir, que el hipotecado pagará 614 euros más al año.
El euríbor está disparado. El índice ha roto todas las previsiones de los expertos tan solo ante la perspectiva de un alza de tipos (el BCE aún no los ha tocado) y ha entrado en positivo mucho antes de lo esperado. Su mínimo histórico lo registró no hace mucho: el 20 de diciembre de 2021, en el -0,518%.
La razón principal de la fuerte subida del euríbor es la inflación, que está desbocada por la guerra de Ucrania (alcanzó el 7,5% en la zona euro en marzo desde el 5,9% de febrero). Si no baja en los próximos meses, el BCE se verá obligado a aumentar sus tipos de interés para contenerla. "Ante este escenario, las entidades financieras europeas ya están aplicando unos intereses más altos a los préstamos que se conceden entre ellas, lo que provoca que el euríbor cotice al alza", apuntan en HelpMyCash.
En la última reunión del BCE la semana pasada, su presidenta Christine Lagarde advirtió de que "los riesgos al alza para la inflación se han intensificado" a corto plazo por la guerra en Ucrania, que ha provocado un incremento interanual de los precios de la energía del 45%. Así, la autoridad monetaria ha decidido adoptar una postura de cautela ante los riesgos y las incertidumbres para la economía y insistió en que considerará finalizar las compras de activos en el tercer trimestre, siempre que los datos apoyen las previsiones a medio plazo de inflación. Lagarde también abrió discretamente la puerta a una subida de tipos a corto plazo.
La próxima reunión de la entidad con sede en Fráncfort es el 9 de junio y, previsiblemente, se adoptarán nuevas decisiones monetarias. No solo es una reunión en la que se publicarán las nuevas proyecciones macroeconómicas de la zona euro, también es la última reunión que tiene lugar en el segundo trimestre del año, por lo que cualquier decisión sobre el fin de las compras netas deberá adoptarse en ella, "en algún momento después" del fin de las compras netas. Preguntada por los periodistas, la francesa ha subrayado que "en algún momento después" puede significar una semana o varios meses.
Desde Adicae alertan de que la progresiva subida del euríbor genera una presión adicional a los consumidores, que ya se ven sometidos a una inflación "histórica" y unos precios de la energía "descontrolados". De su lado, los bancos están respondiendo con un encarecimiento de la oferta de hipotecas a tipo fijo y una rebaja de las hipotecas a tipo variable.