España, con todo el viento a favor para liderar la eólica marina
Falta ordenar el espacio marítimo, cambiar la ley y convocar subastas
La hoja de ruta para que la energía eólica marina u offshore despegue en España está diseñada y aprobada por el Ministerio para la Transición Ecológica desde diciembre. Un programa, bien acogido por el sector, los ecologistas y el turismo, pero pendiente de “los Planes de Ordenamiento del Espacio Marítimo (POEM), la actualización de la normativa, totalmente desfasada y, lógicamente, de la convocatoria de subastas para que las empresas liciten los proyectos”, resume Juan Virgilio Márquez, director general de la Asociación Empresarial Eólica (AEE).
Un sector que “empezó hace apenas una década con la tecnología de cimentación fija, la más extendida en el mundo y sin recorrido en España”, recuerda Márquez. Una de las razones es que la instalación de este tipo de parques eólicos requiere aguas poco profundas, que no es el caso del litoral español.
En estos diez años se ha desarrollado mucho la eólica marina flotante, “mucho más versátil, flexible y competitiva”, destaca Márquez, por la que apuesta España. Es una tecnología donde las empresas de nuestro país son punteras y tienen un papel de liderazgo y también nuestros astilleros. En ellos se construyen y envían componentes y plataformas a todo el mundo.
“Es curioso que España es uno de los primeros fabricantes y que más tecnologías propias ha desarrollado en soluciones flotantes, y todo ello sin una sola licitación en tu propio país”, apunta Pedro Mayorga, director ejecutivo de EnerOcean, pioneros en el desarrollo de una plataforma semisumergible que prueban en Canarias.
Canarias acogerá los primeros proyectos piloto de parques
El Gobierno cifra entre 500 y 1.000 millones las necesidades de inversión para potenciar la infraestructura portuaria, y otros 200 millones en ayudas para I+D hasta 2023. “Necesitamos mayor visibilidad sobre las zonas marinas objeto de concurrencia, los volúmenes de potencia eólica a desarrollar y sus fechas estimadas”, reivindica Manuel Fernández García del Campo, director de proyecto y negocio de Ocean Winds.
En el marco de la transición energética y con vistas a 2030, el objetivo es alcanzar entre 1 y 3 gigavatios (GW) de eólica marina flotante y hasta 60 MW de otras energías del mar como las de las olas o las mareas.
La eólica marina es una tecnología clave en la UE, donde crecerá desde los 12 GW actuales hasta los 60 en 2030, según los planes de la Comisión Europea.
Con 6.000 kilómetros de costa sin apenas plataforma continental y grandes profundidades muy cerca de las playas, una potentísima industria naval con grandes empresas especialistas en la construcción de componentes de energía eólica, talleres navales y grandes ingenierías y la hoja de ruta, nuestro país cuenta con todo el viento a favor en alta mar para consolidarse como “un hub internacional de fabricación y desarrollo de tecnología eólica marina flotante, siendo ya el primer desarrollador de prototipos del mundo”, señalan desde la AEE. “Es necesario hacer hincapié en la alta capacidad del sector eólico y naval español, que abarca toda la cadena de suministro”, enfatiza Márquez.
Las cifras
3
gigavatios es el objetivo máximo a lograr en España –el mínimo es 1 GW– de energía eólica marina flotante y hasta 60 MW en otras energías del mar en el marco de la transición energética y de cara a 2030.
200
millones de euros habilitará el Gobierno en ayudas para I+D+i hasta 2023 y estima entre 500 y 1.000 millones las necesidades de inversión para potenciar las infraestructuras portuarias.
Una liga en la que juegan multinacionales como Iberdrola, Repsol, Siemens Gamesa u Ocean Winds (EDP Renovables y Engie) y en la que tienen un rol destacado otras más pequeñas como EnerOcean o X1 Wind. En el mejor de los casos el primer parque eólico marino flotante en España no será una realidad antes de 2028.
En el sector justifican las reticencias de ecologistas e industria turística “en el ruido provocado por proyectos especulativos sin ningún sentido: no se ha convocado ninguna subasta y sin ellas no puede haber proyectos”.
En opinión de Daniel López Marijuán, responsable del área de energía de Ecologistas en Acción Andalucía, y en espera de los POEM, las ventajas de la eólica marina flotante “son todas, la rentabilidad es mucho mayor que en la terrestre, aunque sea más costosa de implementar, la eficiencia es altísima y cuando la instalación ha cumplido su ciclo de vida útil, al desmantelarla no deja huella ecológica”.
La hoja de ruta “es razonable y positiva mientras se respete el medio ambiente y se resuelvan el impacto paisajístico, el impacto sobre cetáceos y otras faunas o zonas de pesca; se utilicen recursos endógenos, de tecnología propia, que la tenemos, y se genere empleo local”, concluye.
Por las características de nuestro litoral, los parques eólicos se sitúan a 20-30 millas mar adentro, y a esa distancia y con la curvatura de la Tierra apenas son visibles desde la playa.
Galicia y el noroeste español, Cataluña, Andalucía y, sobre todo, Canarias son las comunidades costeras que tienen más potencia para el desarrollo de la eólica marina flotante. En las islas y, en concreto, en el centro de ensayos Plocan (Plataforma Oceánica de Canarias), X1 Wind prueba PivotBuoy, “un primer prototipo de una tecnología muy innovadora”, señala Alex Raventós, CEO de la compañía.
“La plataforma se orienta con el viento de forma pasiva, como lo haría un barco que bornea (giros circulares que realiza la nave alrededor de su ancla estando fondeada) con la brisa, de forma que está siempre en una posición más óptima y podemos rediseñar la estructura, reduciendo mucho el peso y coste asociado a la misma, lo que implica beneficios económicos y ambientales”, precisa.
De un vistazo mar adentro
¿Qué es? La eólica marina es una energía renovable que utiliza el potencial del viento que se genera en alta mar.
Tecnologías. En la eólica marina se distinguen dos tecnologías: cimentación fija y flotante. La utilización de una u otra depende de las propiedades del terreno y, sobre todo, de la profundidad del emplazamiento.
Cimentación fija. Los aerogeneradores van anclados al fondo marino y se utiliza para profundidades de hasta 50-60 metros.
Flotante. Los aerogeneradores están compuestos por una plataforma flotante anclada al fondo marino por unas catenarias o tensores.
Líderes. Europa, Estados Unidos y Japón son los líderes en innovación en la eólica marina flotante. España ocupa una posición principal, al ser el país con el mayor número de tecnologías desarrolladas (9 de 34 a principios de 2021).
Datos. La energía eólica es ya la principal fuente de generación de energía eléctrica en España y la primera tecnología del sistema eléctrico en nuestro país, tanto en potencia instalada, con 27.446 MW, como en generación, con más del 23% de la producción; aporta un 0,3% del PIB y exporta 1.748,6 millones de euros, según datos de la Asociación Empresarial Eólica.
Ventas. España es el tercer exportador del mundo de aerogeneradores y tiene más de 250 centros industriales que ponen en alza su papel de la cadena de valor de la industria eólica y de su desarrollo tecnológico.