Francesc Ros: “Nuestras franquicias ganan muchísimo dinero”
El exempleado de Telepizza fundó una cadena de pizzerías que ha abierto 14 locales desde el comienzo de la pandemia y factura 31,6 millones de euros al año
De empleado a competencia de una misma marca. Francesc Ros (1975, Barcelona) sabe lo que es empezar en la base de una organización e ir escalando posiciones. Comenzó su trayectoria profesional como repartidor de Telepizza mientras estudiaba Aparejadores. Poco a poco fue adquiriendo más responsabilidad hasta llegar a ser el director general de operaciones de la compañía en México y, años más tarde, dueño de una franquicia. Pero soñaba con emprender su propio proyecto y lo consiguió en 2010 con Pizzerías Carlos, de la mano de su antiguo socio, Carlos Hernández. Ahora, 11 años más tarde, con un nuevo socio, Xavier Crespo, la empresa cuenta con 64 locales y factura 31,6 millones de euros, aunque no pierden de vista el objetivo de llegar a los 100 locales en 2022.
- R. Ha sido un año duro para la hostelería, pero han abierto 14 nuevos locales desde que comenzó la pandemia.
- R. Sí, nosotros éramos ya profesionales del delivery. La esencia de este negocio es que somos capaces de llevarte el producto que elaboramos a tu domicilio en 30 minutos. Esto ya era la fuente principal de ingresos antes del Covid-19. Con la pandemia, al estar todos los locales cerrados, lo que hemos hecho ha sido reforzar nuestras ventas a domicilio. Hemos tenido que reinventarnos, evidentemente, hemos tenido que crecer en infraestructura y en recursos humanos para poder hacer frente al incremento de la demanda. Antes el 60% de nuestros ingresos venían del delivery y ahora estamos en un 80%.
- R. ¿Cómo prevén que sea la vuelta a la normalidad? ¿Volverán a recuperar peso las tiendas?
- R. Como estamos en diferentes comunidades autónomas ya tenemos un poco la foto final. Por ejemplo, en la Comunidad de Madrid nunca hemos estado cerrados al 100%, mientras que en Cataluña los locales han estado cerrados completamente en el mes de octubre. Evidentemente, el delivery ha tomado un protagonismo muy fuerte, pero los locales están poco a poco volviendo a ser lo que eran. Sí que es verdad que funcionan mucho mejor los que tienen terraza que los que no la tienen. Creo que el incremento de venta a domicilio ha llegado para quedarse, que los locales irán volviendo a la normalidad poco a poco.
- R. El primer local abrió en Alcobendas. ¿Apuestan más por la periferia que por el centro de Madrid?
- R. No, pero cuando abres el primer local en una ciudad no tan grande como puede ser Madrid, pasas menos desapercibido. Cuando abres en una gran urbe, eres uno más, pero cuando abres en una población más pequeña, la gente comenta que ha abierto una pizzería nueva. Pero Alcobendas fue un tema circunstancial, podría haber sido cualquier otro municipio. Luego hemos ido creciendo: en la Comunidad de Madrid, estamos en absolutamente todas las poblaciones de más de 50.000 habitantes. Es verdad que todavía no damos servicio al 100% de la ciudad de Madrid, pero tenemos bastante presencia, el resto es una cuestión de tiempo.
- R. ¿Por qué han crecido tan rápido?
- R. Yo creo que es una conjunción de tres factores. En primer lugar, que tenemos un producto muy bueno, que el cliente valora mucho. Después, el hecho de que nuestra imagen sea bastante diferencial a la competencia. Son locales muy acogedores, que tienen servicio de mesa... Un toque distinto. Y que el servicio que damos también intentamos que sea el mejor posible. De ahí que, por ejemplo, cuando nos incorporamos a los agregadores [Glovo, Deliveroo...], a principios del año pasado, seguimos repartiendo nosotros, no usamos sus riders. Los utilizamos solo como plataforma de entrada, pero no queremos que nuestro producto lo toque nadie que no seamos nosotros, por un tema de formación y de estandarizar el servicio a domicilio. Haces un pedido con cualquiera de estas plataformas, porque consideramos que es importante estar en ellas, pero lo servimos nosotros.
- R. ¿Cómo cuidan al personal para garantizar este servicio?
- R. Tenemos una política de crecimiento con unos planes de carrera y una formación importante por la expansión que estamos teniendo, y eso la gente lo agradece. Las personas que realmente quieren hacer carrera con nosotros se dan cuenta de que empezando con un puesto muy básico al poco tiempo pueden ocupar puestos de responsabilidad. Está habiendo una expansión real y estamos constantemente abriendo locales. Mañana abrimos uno en Alcalá de Henares, la semana que viene en Valladolid, que todavía no estábamos, la semana pasada, en Barcelona... Eso son oportunidades para todo el mundo que trabaja aquí.
- R. ¿Cuál es el siguiente reto que tienen por delante?
- R. Nuestro objetivo es seguir creciendo. Lo hacemos mediante tiendas propias y franquiciados. De hecho, somos una de las franquicias más rentables ahora mismo. Nuestros franquiciados ganan muchísimo dinero, con una inversión media de 300.000 euros. Ahora tenemos un plan de continuar nuestra expansión nacional y hemos dado el primer paso para abrir mercado en Latinoamérica durante el año que viene. Estamos estudiando México y Colombia. En septiembre vamos a una feria de franquicias en Ciudad de México y todavía no tenemos el punto exacto de dónde vamos a desembarcar, pero es nuestro siguiente reto. Todo ello sin dejar de lado nuestra expansión en España, evidentemente.