Guindos: "La moderación en los salarios de los ejecutivos de banca es importante"
Recuerda que el BCE solo controla que el gobierno corporativo es el correcto y que cualquier limitación es una decisión política
En plena polémica por los ERE presentados por BBVA y CaixaBank y el fuerte debate surgido sobre las remuneraciones de los máximos ejecutivos de la banca española, el vicepresidente del BCE ha señalado la importancia de la moderación en las retribuciones. "La moderación es importante, es una cualidad fundamental en la vida", ha señalado, para a continuación apuntar que el BCE no tendría competencia alguna para establecer limitaciones a los salarios fijos de los altos ejecutivos de la banca española.
Guindos ha recordado que el año pasado, con el estallido de la crisis, al tiempo que el BCE apremió a toda la banca suspender el pago de dividendos también hizo la recomendación expresa de no pagar a los ejecutivos la retribución variable o bonus. "Y se cumplió con bastante exactitud", ha puntualizado durante su intervención en el foro organizado hoy por la consultora EY.
Al margen de aquella recomendación, motivada por el momento de crisis, el vicepresidente del BCE ha añadido que la institución no entra a juzgar las remuneraciones de la banca, a menos que no se ajusten al buen gobierno corporativo. "Intentamos que el gobierno corporativo sea el correcto, las remuneraciones deben pasar todos los filtros y todos los controles. Los bancos son entidades privadas, desde el BCE solo entramos a juzgar si el gobierno corporativo no es el adecuado", ha señalado.
Guindos ha apuntado además que la limitación de los sueldos de los ejecutivos de banca "es una decisión política". Y ha recordado su decisión, siendo ministro de Economía en España en 2012, de incluir en el decreto ley sobre ayudas públicas a la banca, la limitación expresa del salario del máximo ejecutivo a los 500.000 euros anuales, siempre que la entidad hubiera recibido ayuda pública. Ese de hecho ha sido el salario de José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia hasta la fusión con CaixaBank, donde pasará a cobrar un salario fijo como presidente ejecutivo de 1,65 millones de euros.
Los salarios fijos del consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, y de los presidentes y consejeros delegados de BBVA y Santander superan holgadamente los 2 millones de euros al año, más la retribución variable y otros conceptos salariales como los complementos por pensiones.
Actuar "ya" para elevar la rentabilidad
El vicepresidente del BCE no quiso valorar los ERE presentados en las últimas semanas por BBVA y CaixaBank, y cuya magnitud han rebajado ligeramente ante la presión de los sindicatos. Pero sí ha insistido en la necesidad de que la banca actúe "ya" y de forma rápida para mejorar su rentabilidad y reducir su exceso de capacidad. Ha advertido incluso que la pérdida de rentabilidad entraña el riesgo de que las entidades no realicen las provisiones que sean necesarias, lo que sí sería un peligro para la estabilidad financiera.
Guindos ha recordado que el nivel de tipos en la zona euro en los próximos años “va a ser el que va a ser”, lo que obliga a la banca a mejorar en eficiencia. El ROE de la banca de la zona euro, indicador que refleja la rentabilidad sobre los recursos propios, fue del 5% en 2019, se desplomó al 1,3% en 2020 y mejoraría al 3% este año, según ha avanzado Guindos, un nivel muy bajo. “Si la baja rentabilidad permanece, puede llegar a erosionar la base de capital, hay que actuar rápido”, ha advertido