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Inversión

La banca deja de ser sector maldito y recupera el favor de los inversores

La subida de los tipos de la deuda y la vuelta del dinero a los cíclicos permiten alzas en lo que va de año de entre el 15% y el 30%

GettyImages

Ignorados por los analistas, cotizados a precios de derribo, restringidos en el pago de dividendos y excluidos de las carteras ganadoras, los bancos españoles han sido durante meses e incluso años el sector maldito de la Bolsa española. Únicamente han salido a la palestra por sus desinversiones, la absorción de cajas de ahorros agonizantes y, más recientemente, por operaciones de concentración, como la de Caixabank-Bankia y la de Unicaja-Liberbank.

Pero en estos primeros meses de 2021 los inversores han vuelto los ojos a la banca. Roberto Scholtes, director de estrategia de UBS en España lo explica: “El repunte de los tipos de interés de la deuda mejora las expectativas de los bancos, así como la vuelta del dinero a los valores cíclicos, a aquellos que se verán beneficiados de la prevista recuperación económica”. “Está claro que los márgenes financieros ya han tocado suelo”, concluye.

Destacan las revalorizaciones en este año de entorno al 30% en Bankinter y Banco Sabadell, las de Caixabank y Bankia del 19% y 17,5%, y las del 16,5% y 18% de los gigantes Santander y BBVA. Ligeramente más rezagados quedan los dos más modestos y a las puertas de una fusión: Unicaja sube el 8,5% y Liberbank un 10%. Unas alzas que han elevado la capitalización de la banca española en lo que va de año en 17.300 millones de euros hasta los 113.000 millones respecto a los 95.774 con los que cerró el 2020.

El impulso de la banca española se ha forjado fuera de nuestras fronteras con la subida del bono estadounidense a 10 años que en un año ha pasado de una rentabilidad del 0,504% hasta los niveles actuales del 1,5%. Por fin, desaparecía el aplanamiento de la curva de tipos de interés –Europa se ha contagiado de este movimiento– que como dice Gonzalo Sánchez, analista de la gestora Gesconsult, es indicador de economías lánguidas, y volvía la curva de tipos (muestra de economías en recuperación con tensiones inflacionistas) permitiendo, por fin, una mejora del margen financiero de la banca.

Los analistas son positivos sobre el sector pero su recorrido alcista ya está limitado. Las posiciones, más que estratégicas, son tácticas

Carlos García González, gestor de renta variable de Mutuactivos, apunta además como explicación de la mejoría “el escaso posicionamiento inversor en el sector y la relajación de algunas restricciones regulatorias relativas al uso del capital, como el pago de dividendos”. Este año el BCE ha permitido a la banca abonar hasta un 15% de su beneficio acumulado de 2019 y 2020 – tras prohibir los pagos en 2020-, medida que expirará en septiembre de este año.

En el horizonte cercano hay motivos para el optimismo sobre el sector bancario ma non troppo.

Tras este movimiento bursátil al alza, la solidez de la banca queda condicionada a la mejora de la recuperación económica –muy marcada por el ritmo de vacunación y la vuelta a la normalidad– en España y Europa, y también en Latinoamérica para BBVA y Santander. Además, el horizonte sigue siendo de tipos cero en el medio plazo para la zona euro, a pesar del repunte de la inflación que se espera para este año.

Provisiones y morosidad

Desde UBS apuntan al positivo colchón de provisiones que tiene la banca, que el año pasado se elevó hasta los 27.000 millones de euros frente a los 18.600 millones que tenían en 2019. Un dinero que en parte puede acabar en la cuenta de resultados de las entidades si la morosidad de empresas y familias no se dispara. Ahora mismo, una gran parte de esa morosidad está anestesiada por las medidas del Gobierno ante la pandemia del Covid-19, y en las que la banca está siendo una pieza clave.

Hasta ahora, el ICO ha movilizado más de 120.000 millones de euros en financiación bancaria para pymes y autónomos con aval público. Además, el Gobierno aprobó este viernes un fondo por 3.000 millones de euros para reestructuraciones de créditos ICO en el que va a ser decisiva la respuesta de la banca: en una primera fase se podrá negociar con el cliente la extensión de los plazos; si no, convertir esos préstamos de aval público en préstamos participativos. Incluso se prevén las ayudas públicas directas en una tercera fase y solo en caso extremo llegarían las quitas –el Estado avala por entre el 60% y el 80% del riesgo–, un peligro que los expertos creen muy limitado para la banca española y manejable en todo caso.

El riesgo del sector en los créditos ICO es limitado y manejable, según los expertos

Gonzalo Sánchez apunta a que una quita en la que participen los bancos “puede ser hasta bueno”. “Si se limita a empresas viables y en unos porcentajes adecuados el impacto será manejable y tendrá una repercusión positiva en la economía y también en el negocio de los bancos con las empresas”, explica.

La evolución de la morosidad y los impagos será por tanto determinante en los resultados de la banca, una vez que los expertos vaticinan ya una mejora del margen financiero de las entidades. En Barclays apuntan que “los bancos españoles podrían soportar una tasa de morosidad del 30% en los sectores más afectados en la actual crisis de Covid-19. Pero vemos que las empresas están en mejor forma respecto a la crisis anterior y la tasa de incumplimiento podría mejorar. Es probable que Santander y Sabadell se beneficien más en tal escenario”.

La evolución del crédito es otro de los catalizadores de los bancos junto al cobro de comisiones, que ha tenido una buena evolución el pasado año. Para Roberto Scholtes, tras la caída en el crédito del pasado ejercicio, habrá crecimientos modestos entre el 2 y el 3% para los próximos años. El informe de Credit Suisse muestra preocupación por la bajada brusca en el crédito al consumo –con una caída del 36% interanual– mientras aprecian “normalización de las tendencias de crecimiento en las empresas (-18% interanual). Por el contrario, las hipotecas han sostenido la demanda general”, con una caída del 7,6%.

La otra gran baza de la banca son los costes, que las entidades lograron bajar en un 5% en 2020. Para UBS, el recorte llegará al 7% en 2021 para volver a crecer a partir de 2023. Buena muestra son los expedientes de regulación de empleo, como el anunciado por BBVA de 3.000 empleados, o el cierre de sucursales que actualmente se cifran en 22.271, tras haber clausurado 23.391 desde la crisis de 2008.

Con este entorno, los analistas pronostican una vuelta al beneficio de la banca en 2021 después de las pérdidas de 5.533 millones, condicionadas por Santander (con números rojos por 8.771 millones). Así, desde UBS apuntan que este año los bancos españoles tendrán ganancias netas en torno a los 10.000 millones de euros, hasta recuperar en 2024 los niveles de beneficios previos a la pandemia.

Recomendación y recorrido

Después del rally vivido en la banca, ¿queda recorrido alcista? “Estructuralmente no tenemos una visión muy positiva en el sector. Creemos que el escenario de bajos tipos de interés y escaso crecimiento va a limitar su rentabilidad a medio plazo. Además, el sector se enfrenta una creciente competencia derivada de la aparición de nuevas alternativas a la banca tradicional (Fintech). Sin embargo, a corto plazo el comportamiento de los bancos va a seguir ligado al movimiento de los tipos y tácticamente puede tener interés”, indica Carlos García, analista de Mutuactivos.

La gestora tiene en cartera a Bankinter y BBVA. “En ambos valores el mercado está infraestimando los beneficios de 2021. Bankinter está más barato de lo que podría parecer debido al efecto que va a tener la desconsolidación de Línea Directa en los fondos propios. BBVA, por su parte, presenta un excedente de capital de entre 7.000 y 8.000 millones que creemos que podrá ser repartido a los accionistas o reinvertido en iniciativas que generen valor”.

Ruiz-Scholtes cree que el mercado ha descontado con estas recientes subidas las novedades positivas del sector. “Vemos ya un alza muy limitada que iría en consonancia con la del Ibex 35 hasta final de año, que estimamos en torno al 6%. Creemos que Santander, BBVA y Caixabank son los que concentrarán la subida”, concluye. Gonzalo Sánchez, de Gesconsult, considera que aún les queda algo de potencial de subida pero muy ligada a un escenario de tipos al alza: lo seguirán haciendo bien si estos suben. Este experto apuesta por Unicaja y Liberbank que, a su entender, se han quedado rezagados en la subida y ahora tienen más potencial.

El banco estadounidense Goldman Sachs tiene a Santander y Unicaja en la zona de compras, mientras se muestra neutral con Caixabank y Bankinter. Sin embargo, para Credit Suisse el valor en compra es Caixabank, mostrándose neutral con Santander y BBVA, aunque prefiere entre ambos la entidad presidida por Ana Botín, ya que espera mejor comportamiento en Brasil que en México. Por último, Barclays sobrepondera a Caixabank con un precio objetivo de 2,7 euros y se sitúa neutral en BBVA, con una valoración a 4,40 euros.

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