Cuándo interesa amortizar hipoteca con los tipos al cero
Con el euríbor por los suelos, invertir los ahorros es, sin duda, más rentable que usarlos para adelantar el pago de la deuda Pero si se tiene derecho a la deducción por compra de vivienda, la devolución anticipada hasta 9.040 euros por titular es la mejor opción
Se acerca el final del año y la idea de amortizar la hipoteca para aligerar la deuda con el banco pasa por la mente de muchos hipotecados. Si conviene o no devolver parte del préstamo de forma anticipada depende de varios factores, pero los expertos insisten en tener muy presente el escenario actual de tipos de interés en el cero, especialmente si se tiene un crédito variable referenciado al euríbor.
Desde el punto de vista fiscal, no hay debate. Siempre que se tenga derecho a la desgravación por haber comprado la vivienda habitual antes del 1 de enero de 2013, amortizar hipoteca es rentable. De hecho, la rentabilidad de hacerlo supera prácticamente a la de cualquier otra inversión. Es posible obtener hasta 1.356 euros por titular, dado que Hacienda devuelve el 15% de lo aportado en el ejercicio hasta un límite de 9.040 euros. Por ejemplo, con una cuota mensual de 500 euros, al cabo de 12 meses se han pagado 6.000 euros, de manera que habría que amortizar otros 3.040 euros para obtener el máximo beneficio fiscal en la declaración de la renta.
Casi dos millones de hipotecas sobre viviendas no pueden aplicar la desgravación fiscal
Pero en España hay casi dos millones de hipotecas sobre viviendas que se firmaron a partir de 2013, según datos agregados de Estadística, y que no pueden aplicar la deducción en el IRPF. En estos casos, Paula Satrústegui, directora de planificación financiera de Abante, sostiene que a nivel financiero hay que valorar los tipos de interés. “Actualmente, hay unos tipos muy bajos y apenas se pagan intereses”. Así, asegura que “interesa amortizar solo si las inversiones o ahorros dan menos rentabilidad que el coste de financiación, mientras que interesa mantener la hipoteca si la cartera financiera está preparada para dar más rentabilidad que ese coste de financiación”.
Sin expectativas de subida
Los tipos oficiales de interés de la zona euro se mantienen en mínimos históricos en el 0% y no hay expectativa de que vayan a subir pronto debido al impacto de la pandemia del coronavirus en las economías. Como consecuencia, el índice euríbor –al que están ligadas la mayoría de las hipotecas a tipo variable en España– se encuentra también en niveles mínimos negativos cercanos al -0,5%. En este escenario, y si no hay incentivo fiscal, en términos financieros no merece la pena realizar pagos anticipados de la deuda hipotecaria, dado que prácticamente no se reducirían los intereses totales que se abonan a lo largo de la vida del préstamo.
Por ejemplo, si se tiene una hipoteca en la que quedan por devolver 60.000 euros en diez años a un tipo de interés del 0,5%, el coste total del crédito, sumando capital e intereses, asciende a 61.525 euros. Con una cuota mensual de 512 euros, se están pagando unos 25 euros de intereses al mes. En caso de amortizar anticipadamente 20.000 euros, el principal pendiente quedaría en 40.000 euros y los intereses globales se reducirían en 509 euros, hasta los 1.016 euros. La letra se quedaría en 341 euros, de los que 16 euros serían intereses. Es decir, el ahorro en intereses apenas sería de 9 euros al mes.
El euríbor a 12 meses se sitúa en niveles mínimos históricos, por debajo del -0,4%
Por otro lado, hay que tener en cuenta también el componente psicológico. “Hay personas que conviven bien con las deudas y otras que no y prefieren amortizar aunque fiscalmente y financieramente no sea eficiente”, asegura Satrústegui.
Juan Villén, responsable de hipotecas en Idealista, recuerda que la decisión de amortizar o no también “depende de la situación de cada familia”. Subraya, además, que en estos tiempos de incertidumbre por el Covid “es importante saber la capacidad de ahorro que se tiene y asegurarse de que se tiene un colchón por lo que pueda venir, como quedarse sin empleo o ver reducidos los ingresos”.
Y no hay que olvidarse de las comisiones que, sobre todo en las hipotecas fijas, penalizan la cancelación anticipada del préstamo. La comisión por riesgo de tipo de interés se aplica únicamente en caso de que el banco perdiera dinero como consecuencia de la operación. Antes de decidir, conviene hablar con el banco para esclarecer las posibles comisiones.
Comisión de amortización
Tipo variable y fijo. La nueva Ley Hipotecaria establece una comisión por desistimiento del 0,25% como máximo por amortizar durante los tres primeros años del préstamo y de hasta el 0,15% durante los primeros cinco años. Pasados esos plazos, no se puede cobrar nada.
Tipo fijo. La comisión por riesgo de interés se limita al 2% durante los 10 primeros años del periodo fijo y al tope del 1,5% durante el resto del plazo. Así, adelantar el pago de la hipoteca resulta más caro durante los primeros años.