El teletrabajo no matará la recuperación del mercado de oficinas
Siguen siendo irremplazables en formación, creación de equipos, sinergias... y eficiencia
Los otrora bulliciosos bloques de oficinas europeos parecen ciudades fantasma. En el continente, el 75% siguen vacíos, según los expertos. La tendencia al teletrabajo, amplificada por los confinamientos, ha creado una nueva realidad en el mercado de alquiler de oficinas.
Y esa realidad favorece a los inquilinos. En Reino Unido, se ha abandonado el viejo estándar de contratos de 10 años, con ajustes de alquiler solo al alza. Los contratos son ahora de solo tres años, según un CEO de una gran inmobiliaria del país. Algunos dueños solo pueden conseguir clientes ofreciendo contratos de alquiler tipo WeWork, casi sin plazo de preaviso.
Los arrendatarios británicos reticentes podrán sacar más provecho de la debilidad del mercado. Después de todo, el actual promedio del 4% de rendimiento del alquiler en el país sigue pareciendo jugoso comparado con el de Berlín, que es un mercado más candente que el de Londres. Y con los promotores enfrentados a inciertas perspectivas, es probable que escaseen los nuevos proyectos durante algunos años.
Compañías como PwC y Twitter sugieren que esto es más que un ciclo bajista en los alquileres. Contemplan una nueva era en la que trabajar desde casa sea lo estándar. Tanto la consultora como la red social han dicho que la mayoría de su personal puede trabajar desde casa a partir de ahora. Más gente fuera de la oficina todo el tiempo significaría menos espacio y menores costes de propiedad. Es una perspectiva atractiva para los gerentes preocupados por los costes. Pero aunque las oficinas pueden ser caras, siguen siendo irremplazables en lo que se refiere a formación, creación de equipos, sinergias y, a menudo, eficiencia.
Trabajar desde casa tiene sus propios costes, y no solo en equipos de comunicaciones. En una encuesta de Morning Consult encargada por Prudential, más de la mitad de los teletrabajadores dicen que se sienten desconectados de la aseguradora. Y muchos empleados no pueden ser muy productivos en casa, debido a la falta de espacio o las excesivas distracciones. La caída de los alquileres no presagia necesariamente una revolución inmobiliaria.
Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción, de Carlos Gómez Abajo, es responsabilidad de CincoDías