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Mercados

El dólar cae tras la actuación de la Fed y el oro vuelve a revalorizarse

Según los expertos, demasiada fortaleza en la divisa estadounidense podría provocar un encarecimiento en el coste de la financiación

Reuters
Fernando Belinchón

La magnitud del golpe que la crisis del Covid-19 está propiciando al mercado ha provocado profundos cambios en el comportamiento de los inversores. Además de agudizar las ventas tanto en la Bolsa como en la deuda, algunos de los activos refugio por excelencia han dejado de comportarse de forma normal.

Si bien hasta esta misma mañana el dólar se había distinguido tanto del yen japonés como del oro como el único valor seguro capaz de capear el temporal, el último anuncio de la Fed ha provocado un fuerte terremoto en el mercado de divisas. Jerome Powell ha sacado la artillería pesada. La Reserva Federal ha eliminado todos los límites a su programa de compra de deuda, tanto de cantidad como de tiempo, por lo que es previsible que el mercado se inunde de nuevos dólares.  

Como resultado, la divisa estadounidense corta hoy en parte su intenso rally y baja un 0,8% respecto al euro. El oro, que esta mañana retrocedía un 1,58% en lo que iba de año, ya está en positivo frente al 31 de diciembre de 2019 tras revalorizarse hoy más de un 3% y superar los 1.530 dólares por onza.

El pánico ahora contenido gracias a la Fed había provocado recientemente efectos contundentes en el mercado de divisas. La libra británica marcó el jueves pasado su mayor caída en ocho días desde el año 1992. El dólar australiano se desplomó hasta niveles de 2002 y el peso mexicano, sigue todavía hundido en mínimos históricos. 

Los diferentes agentes del mercado han estado buscando liquidez de forma apresurada. La alta demanda de la divisa estadounidense impulsó su revalorización y, además, secó las líneas de financiación en dólares que son usadas por grandes empresas, estados y entidades financieras. Ante este panorama y con el fin de controlar la escalada de su valor, la Reserva Federal junto con otros grandes bancos centrales ya anunciaron el viernes que aumentarán la financiación en dólares para entidades de fuera de Estados Unidos. Si anteriormente estos bancos centrales realizaban subastas de préstamos en dólares una vez por semana, desde este lunes se realizan diariamente.

Y es que un dólar demasiado fuerte puede suponer todo un peligro para el ya de por sí estresado sistema financiero. “Es precisamente lo que la economía global no necesita en estos momentos, su fortaleza endurece las condiciones de financiación haciendo que la deuda denominada en dólares sea más cara y pudiendo provocar un aumento de la inflación en el momento más inoportuno”, aseguró a Bloomberg Alexander Wolf, director de estrategia inversora en Asia de JP Morgan. El pasado mes de septiembre, según datos del Banco Internacional de Pagos, había 12,1 billones de deuda denominada en dólares en todo el mundo, y esa cifra, excluyendo a la de los bancos.

Además de en la deuda, el impacto de esta escalada del dólar también se deja sentir en el mercado de carry trades. Se trata de una parte del mercado de divisas en el que los inversores se dedican a vender monedas con tasas de interés bajas comprando aquellas que tienen tasas de interés más elevadas, que suelen ser la de los países emergentes. Gracias a esta operativa, además de rentabilidad, se consigue que haya un arbitraje financiero entre países con diferencias en los tipos de interés de los bancos centrales y que los países emergentes consigan acceso a las principales monedas extranjeras. Según datos de Bloomberg, en lo que va de año, los retornos de los préstamos en dólares hechos en este mercado son del -13%, el mayor hundimiento desde 1999.

“No es el momento de invertir en carry trades, la clave de este mercado es que la volatilidad se mantenga baja, el mundo ha cambiado y es difícil que los carry trades resuciten”, afirmó a Bloomberg Masafumi Yamamoto, estratega jefe de divisas de Mizuho Securities.

“Estamos ante una crisis económica sin precedentes, sin embargo, hay motivos para mantener la esperanza”, sostiene Enrique Díaz-Álvarez, analista del mercado de divisas en Ebury. “Todos los Gobiernos están preparados para hacer lo que sea necesario, por lo que la vuelta a una estructura económica normal tan pronto como la epidemia esté bajo control puede ser algo razonable”, considera. El experto dice que, una vez más, la clave será la evolución de la pandemia. A medida que el número de contagios crezca en EE UU y se vaya reduciendo en España y en Italia, cree que la fortaleza del dólar se irá diluyendo. 

Sobre la firma

Fernando Belinchón
Madrid. 1994. Máster en periodismo económico por la Universidad Rey Juan Carlos. Redactor de la Mesa Web de CincoDías. En el periódico desde 2016.

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