Start-ups ‘deep tech’: revolución y potencial
Por Marc Torrens, profesor del departamento de Operaciones, Innovación y Data Sciences de Esade.
Este tipo de compañías son empresas que necesitan de un talento muy específico, además de un ecosistema de financiación que entienda que estas empresas requieren periodos de tiempo largos para ver el retorno. En España, el talento no es un problema para las ‘deep tech’, pero sí que lo es el sistema de financiación que tienen a su disposición. Por otro lado, en un mundo ya totalmente globalizado, los recursos necesarios para este tipo de empresas (incluyendo financiación) son también globales.
De momento, la mayor parte de start-ups ‘deep tech’ utilizan tecnologías avanzadas para ofrecer un nuevo producto o servicio que requiere de esa innovación específica. Seguramente, hay más start-ups ‘deep tech’ que ofrecen su tecnología a otras empresas para que mejoren algún aspecto de su negocio, que start-ups que ofrecen productos o servicios directamente al consumidor.
Es importante señalar también que estas empresas necesitan tiempo para que el mercado adopte sus innovaciones, además de que tienen asociado un nivel de riesgo elevado debido a su naturaleza disruptiva.
Tendencias nacionales e internacionales
Las ‘deep tech’ utilizan tecnologías que cada vez son más y más conocidas en la industria y esto hace que su adopción sea más fácil que hace unos años. La popularización de estas tecnologías tiene también el inconveniente de producir confusión y expectativas demasiado elevadas en relación con lo que se puede efectivamente conseguir en el corto plazo.
Sin embargo, estas empresas no son diferentes de las otras: tienen las mismas necesidades que las otras start-ups, deben tener un plan de negocio y un mercado. Un negocio no se puede sustentar simplemente en el desarrollo de las innovaciones tecnológicas o científicas, debe ser viable económicamente. Es decir, no es suficiente con desarrollar una tecnología única y avanzada. Es igualmente importante pensar cómo se va a ofrecer esta tecnología en el mercado y qué necesidades va a cubrir.
La oportunidad de las empresas emergentes relacionadas con la tecnología radica en una cuestión de tiempos. No hay duda de que estas tecnologías (o algunas) serán clave para muchas industrias. Desarrollarlas en estos momentos es interesante en términos de posicionamiento, ya que lo que ahora se considera ‘deep tech’ será en unos años tecnología estándar. Encontrar el momento oportuno es clave para el éxito de dichas start-ups. Su principal desafío reside en el esfuerzo pedagógico que deben hacer para que el mercado entienda su potencial, algo que a menudo supone un freno para la implementación de su plan de negocio. Tienen que educar y, después, vender.
La otra dificultad inherente al tipo de tecnología es que hay que demostrar que funciona y que su implementación es factible. Por lo tanto, estas empresas necesitan clientes que vean la oportunidad y que adopten el riesgo inherente.
Encontrar el mercado y la oportunidad
Todas las start-ups ‘deep tech’ tienen que lidiar con un problema de pedagogía en relación a su innovación tecnológica y encontrar los mercados o clientes que vean la oportunidad, además del riesgo que toda oportunidad relevante tiene asociado.
Algunas de esas tecnologías son interesantes porque provocarán disrupción en todos los sectores. Por ejemplo, las tecnologías como la infraestructura 5G, la tecnología blockchain, el internet de las cosas (internet of things), o el aprendizaje automático (machine learning) tienen un impacto directo en el mundo de los datos, con implicaciones para múltiples ámbitos de la vida social.
Estamos simplemente en el inicio de esta revolución, y no hay duda de que está para quedarse, ya que su potencial se debe al abasto de su aplicabilidad.