La UE acusa a EE UU de violar los acuerdos bilaterales por la aplicación de la Ley Helms-Burton
Las empresas europeas con inversiones en Cuba podrán ser sancionadas y sufrir represalias
Estados Unidos va contra Cuba por el apoyo de la isla a Venezuela y, como daño colateral, afecta intereses de los países de la Unión Europea, principalmente de España. La vicepresidenta de la Comisión Europea y Alta Representante de Política Exterior, Federica Mogherini, ha acusado a Estados Unidos de violar los acuerdos que firmó con la UE en 1997 y 1998 por la entrada en vigor, a partir de este jueves del título tercero de la Ley Helms-Burton, que abre la puerta a sancionar a empresas que tengan negocios en el país latinoamericano.
La UE "recurrirá a todas las medidas adecuadas para abordar las consecuencias de su aplicación",
incluidos sus derechos en la Organización Mundial del Comercio (OMC) y el uso del estatuto de bloqueo, cláusula creada en 1996 para proteger los intereses europeos de las sanciones económicas extraterritoriales, ha asegurado Mogherini.
El apartado tercero de la ley, a pesar de haber sido aprobado en 1996, nunca entró en vigor debido al rechazo de la UE. Estados Unidos prorrogó año tras año la entrada en vigor de la norma hasta que el presidente, Donald Trump, decidió dejar de hacerlo.
La normativa aprobada por el Congreso estadounidense habilita a los ciudadanos americanos-cubanos, que vieron confiscadas sus propiedades en Cuba tras la Revolución de 1959, a demandar en los tribunales del país norteamericano a cualquier empresa extranjera que tenga algún tipo de negocio con ellas. Además, la ley también habilita a la congelación de activos de estas compañías en EE UU.
La industria hotelera española
España es el país que mayor inversión en la industria hotelera tiene en Cuba. Gestiona 35.000 habitaciones, el 52% del total en la isla. Meliá e Iberostar son las dos empresas que más presencia tienen en Cuba, con 32 y 31 establecimientos, respectivamente.
Este nuevo escenario despierta una gran preocupación entre los inversores españoles por lo imprevisible. “Aunque la propiedad de los terrenos le corresponde a la empresa mixta cubana, la obtención de un canon en el caso de un hotel es una prueba de que se está ‘traficando’ con el bien, tal y como está recogido en la ley Helms-Burton”, recalcaba hace unos días el abogado Ignacio Aparicio, asesor legal de empresas españolas con presencia en Cuba, al ser consultado por CincoDías.