El Banco de España alerta de que el cambio climático implica riesgos de solvencia para las entidades financieras
El organismo supervisor anima a la banca a realizar modelo de riesgos
Los bancos deben saber cómo reaccionar ante los efectos del cambio climático. La subgobernadora del Banco de España, Margarita Delgado, ha asegurado este martes que los efectos del cambio climático y de las medidas focalizadas en transformar la economía de una manera sostenible afectan a la solvencia de los bancos, que tienen que identificarlos, cuantificarlos y mitigarlos para hacer frente a estos riesgos.
En su participación en la mesa redonda "Las finanzas sostenibles como motor de la transición ecológica", organizado por el Banco de España y que ha contado con el cierre de la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, Delgado ha añadido que los riesgos inciden de manera directa en la valoración de algunos de los activos presentes en los balances bancarios.
La subgobernadora ha dicho que el Banco de España, como institución de supervisión debe promover que las entidades realicen modelos de riesgo que contemplen el cambio climático, así como también desarrollar pruebas de resistencia en torno a distintos escenarios de transición ecológica.
Delgado ha afirmado, además, que las entidades financieras deben recabar información detallada sobre aspectos como la localización física de los activos o las estrategias de eficiencia de las empresas que reciben financiación. Un punto que ha despertado la crítica del otro ponente del Banco de España, José Manuel Marqués, jefe de la división de innovación financiera, y de Helena Viñes, jefa de desarrollo sostenible de BNP Paribas.
Viñes y Marqués han coincidido en demandar un mayor compromiso contra el cambio climático a a las empresas que reciben préstamos por parte de los bancos. Los representantes del banco central español y de la entidad francesa han asegurado que uno de los principales problemas a los que se enfrentar es al de la poca transparencia de las compañías en cuanto al impacto que tienen sobre el medio ambiente las actividades que realizan.
Delgado, por su parte, ha considerado que "si en un futuro próximo las entidades identifican, cuantifican y mitigan los riesgos de una forma adecuada, no solo estarían contribuyendo a la estabilidad del sistema financiero, sino que además actuarían como un catalizador de cambio" al favorecer que la financiación llegue a las actividades que más contribuyen a la transformación sostenible de la economía.
La subgobernadora ha remarcado que el Acuerdo de París sobre el cambio climático ha supuesto un cambio de inflexión en la lucha contra el cambio climático porque ha puesto de manifiesto el carácter urgente del cambio. El acuerdo no solo habla de los riesgos, sino que reconoce explícitamente la relevancia que debe tener el sistema financiero para canalizar de modo eficiente los recursos necesarios para transformar la economía hacia una más sostenible, ha dicho Delgado.
La ambiciosa hoja de ruta de la Comisión
La Comisión Europea estableció, en marzo de 2018, el Plan de Acción para una economía más ecológica y limpia. Un programa "muy amplio, que va desde las empresas hasta los hogares, pasando por todos los actores". Este plan propone una inversión de 180.000 millones de euros cada año, que debería ser financiado por los bancos privados.
En ese sentido, Viñes considera de suma importancia la "taxonomía", que ha definido como una clasificación de actividades medioambientales positivas para el medio ambiente. Actualmente se encuentran cinco taxonomías diferentes, ha recordado Viñes, lo que dificulta el proceso de integración. Marqués también ha destacado "la importancia de la taxonomía en la elaboración de referencias".
Transformación sin descuidar lo social
La ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha clausurado la mesa redonda con un breve discurso en el que ha abogado por la transformación hacia una economía ecológica, pero sin perder de vista la “variable social”.
Ribera, que ha confirmado que será candidata en las próximas elecciones generales del 28 de abril por Madrid, ha apostado por la “conexión” entre el mundo de las finanzas y el mundo de la ecología para hacer frente al “complejo escenario” que requiere la transformación ecológica. Pero sin perder de vista que en toda transformación hay sectores vulnerables que pueden verse perjudicados y que deben ser atendidos.