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El descenso de la ocupación fuerza a los hoteles a frenar las subidas de precios

Las tarifas apenas suben o bajan por el deterioro en Canarias y Cataluña El retroceso de turistas en Canarias obedece al repunte en Turquía o Egipto

El escenario del turismo en 2018

España cerró el pasado ejercicio con un récord histórico de 81,8 millones de turistas extranjeros. Pero no solo en ese indicador se alcanzaron máximos: los precios y las rentabilidades del sector hotelero también tocaron techo y se recuperaron muy por encima de los niveles previos a la crisis iniciada hace diez años. Un contexto de euforia que sirvió para anticipar una suave desaceleración a lo largo de este ejercicio, como consecuencia, en primer lugar, del trasvase de viajeros hacia destinos más baratos como Turquía, Egipto o Túnez y, en segundo, por la saturación de algunos destinos.

Esas expectativas se han cumplido en el acumulado hasta junio y los expertos aseguran que esa tendencia se mantendrá seguramente en los otros dos meses de temporada alta. El INE dará a conocer hoy los datos de ocupación hotelera de julio, en el que todo indica que la tendencia no se corregirá. En el primer semestre del año, la ocupación hotelera se ha situado en un 56% en los siete primeros meses del año, lo que representa una caída del 1% respecto al mismo período de 2017 y el final de una serie consecutiva de cinco años de crecimiento, según la estadística mensual que elabora el INE a través de cuestionarios a 11.200 establecimientos en temporada alta, especialmente hoteles de cuatro y cinco estrella.

El número de pernoctaciones en establecimientos hoteleros también ha retrocedido un 0,2% tras otros cinco años seguidos de subidas. En ese contexto, los empresarios hoteleros han optado por contener, cuando no bajar, precios para tratar de recuperar demanda por esa vía. La tarifa media que cobran a sus clientes se ha situado en el acumulado hasta junio en una media de 82,5 euros, lo que supone un ajuste del 6,4% con respecto al mismo período de 2017. Una rebaja de precios que también ha afectado al RevPar (ingresos por habitación disponible), el principal indicador de rentabilidad de la industria hotelera, que ha bajado un 12,1% hasta los 51,6 euros. La suma de todos esos datos refleja que los hoteleros habrían contenido precios e incluso los habrían bajado en algunos casos para tratar de recuperar demanda.

La recuperación del turismo nacional ha impulsado las pernoctaciones en destinos urbanos

Magma HC, una de las consultoras más importantes del sector hotelero, elabora un barómetro trimestral con todos los indicadores y el balance es menos pesimista, aunque recoge la misma tendencia. A partir de los datos aportados por 900 hoteles que suman 15.000 habitaciones, el precio medio de una habitación en España en el primer semestre se habría situado en 107,16 euros, un 0,2% más que el año pasado, mientras que el beneficio por habitación disponible (RevPar) habría retrocedido un 0,8%, como consecuencia de los bruscos descensos que se han producido en Canarias y Cataluña. El deterioro de ambos destinos, que suman un número importante de hoteles, ha llevado a que la ocupación haya retrocedido un 1,1% en el primer semestre. Albert Grau, socio director de Magma HC, hace una segunda lectura más allá de la estadística. “La apuesta del hotelero que ha podido ha sido mantener o subir poco los precios a cambio de sacrificar ocupación en pos de un turismo de mayor calidad”, subraya. Grau limita el doble fenómeno de menos ocupación y precios más bajos a dos autonomías (Canarias y Cataluña). “En el conjunto de España, la ocupación ha descendido un -1,1% por la caída en las ocupaciones de Barcelona e Islas Canarias que tienen un peso importante por el gran número de habitaciones de ambos destinos”, resume Grau.

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El impacto más importante se ha producido en Barcelona. Afectada por la crisis derivada del conflicto independentista, la ocupación hotelera en Barcelona (el municipio de España donde hay más camas hoteleras, en torno a 60.000 habitaciones) ha caído un 5,2%, lo que ha llevado a la industria hotelera a bajar un 1,4% los precios para tratar de sostener esa caída. Ese deterioro ha provocado que los ingresos por habitación disponible hayan caído un 6,6%, pese a lo que sigue siendo el segundo más alto de España, con 138 euros, tan solo por detrás de Marbella. El socio director de Magma HC distingue la coyuntura que se vive Barcelona y el resto de Cataluña, donde la evolución ha sido más bien positiva.

En Canarias, la tendencia ha sido similar. La ocupación ha caído un 5,2% en tasa anual, los precios han retrocedido un 0,7% y los ingresos por habitación disponible bajaron un 5,8%. “En el archipiélago canario el descenso se explica por la recuperación de destinos como Turquía, Túnez y Egipto en los meses de menor demanda y también por el creciente interés por Croacia y Grecia durante los meses de verano”, remarca Grau.

Barcelona y Canarias son la excepción entre el resto de destinos españoles, que se han visto beneficiados en gran medida por el repunte del turismo nacional. El socio director de Magma HC destaca el caso de la Costa del Sol. “Torremolinos, Fuengirola o Benalmádena han utilizado al turismo nacional para compensar la menor llegada de británicos y alemanes”. Algo similar ha sucedido en el caso de los destinos urbanos, con subidas de precios e ingresos por habitación disponible, algo que recuerda Grau que sucedió en 2006 y 2007, los años previos al estallido de la crisis. “Zaragoza, Valencia, Bilbao, Málaga o Sevilla han funcionado muy bien. También lo han hecho otros enclaves como Alicante, Córdoba o Granada. Ha pasado lo que sucedió también en 2006 y 2007”.

Baleares, la excepción

Frente al deterioro experimentado por Cataluña y Baleares, donde la llegada de viajeros extranjeros retrocedió en el primer semestre, las otras cuatro grandes autonomías turísticas (Andalucía, Baleares, Comunidad Valenciana y Madrid) han registrado tasas positivas. Especialmente significativos son los incrementos en la Comunidad Valenciana (5,1%) y Madrid (4,7%), gracias en gran medida a que tienen una menor dependencia de los dos grandes mercados emisores (Reino Unido y Alemania) aunque el socio director de Magma HC destaca el incremento experimentado por Baleares. “Sorprende un poco la evolución de Baleares. Se ha producido una importante suma de proyectos de reformas integrales de hoteles, con productos muy interesantes como Meliá, a lo que se ha unido la entrada de grandes cadenas como Hyatt o Marriott, lo que le ha reposicionado como un destino de lujo.

Reino Unido y Alemania, los dos grandes mercados emisores, caen con fuerza

Competidores. La llegada de turistas extranjeros “solo” ha crecido un 1,8% anual en el primer semestre como consecuencia del deterioro experimentado por los dos grandes mercados emisores (Reino Unido y Alemania) que acaparan el 36,5% de las llegadas. El trasvase a destinos más baratos como Turquía, Túnez o Egipto y la depreciación de la libra esterlina frente al euro, lo que encarece los viajes a la zona euro, están detrás de esa tendencia. Reino Unido ha caído un 2% (168.560 viajeros menos) y Alemania ha perdido un 5% (257.781 menos).

Madrid. Es la autonomía menos dependiente de los tres grandes mercados emisores de turistas (Reino Unido, Alemania y Francia). Los datos del INE revelan que su primer mercado emisor es el continente americano, excluido EE UU, de donde proceden el 23,8% de los viajeros que recibe. Un gran número de los desplazamientos de viajeros latinoamericanos a España y viceversa tiene como punto de entrada o salida el aeropuerto de Madrid-Barajas Adolfo Suárez.

Largas estancias. Los datos de llegadas hasta junio muestran como la tendencia de estancias cortas que ha caracterizado al turismo en España empieza a revertirse. En concreto se ha producido una caída del 0,2% en las estancias de 2 a 3 noches (14.214 menos) frente a un aumento del 1,6% entre aquellos viajeros que optan por alargar su estancia entre 4 y 7 noches. Esta es la parte más importante del turismo extranjero que visita España, ya que representa un tercio de las estancias, con 18,2 millones entre enero y junio. La estadística revela que también se han producido incrementos entre aquellos turistas que optan por pasar entre 8 y 15 noches (7,46 millones, con un alza del 1,6% anual) y los que van más allá de las 15 noches (2,33 millones, con un avance del 0,4% respecto al mismo período de 2017).

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