Fundación ONCE despierta vocaciones emprendedoras
Uno de los objetivos prioritarios de la Fundación ONCE, además de procurar la accesibilidad universal, es la realización de programas de integración laboral para personas con discapacidad. Y dentro de estos, como una alternativa más de acceso al mercado laboral de las personas con discapacidad, se ofrece el Programa de Emprendimiento, que se puso en marcha en 1988. Desde entonces, un total de 1.500 emprendedores con discapacidad han recibido apoyo de la Fundación ONCE para poder realizar su proyecto empresarial, a los que se han destinando 12,8 millones de euros.
Para llevar a cabo estos programas de integración laboral la Fundación ONCE tiene una red de centros por todo el territorio nacional donde las personas que están inscritas como demandantes de empleo realizan un itinerario que se inicia con una entrevista ocupacional, explica Sabina Lobato, directora de formación, empleo, proyectos y convenios de Fundación ONCE. “Ahí es donde se detecta la inclinación o la preferencia y también el potencial para el emprendimiento de los demandantes de empleo”, asegura.
La tasa de supervivencia de los negocios emprendidos es del 71%, frente al 54% general
A aquellas personas en que se identifica ese interés y esa capacidad para emprender se las deriva a actividades de formación, como seminarios y talleres, “para que se conciencien de las implicaciones de emprender y cómo sería el proceso de su puesta en marcha”, apunta Lobato. Luego, para los que deciden seguir ese camino se les ofrece asesoramiento y consultoría técnica para desarrollar el plan de negocio. La siguiente fase sería la de la ayuda económica, financiada por el Fondo Social Europeo, que es a fondo perdido, hasta un máximo de 18.000 euros y que no superará el 50% del coste de la puesta en marcha. Finalmente se realiza una consultoría de seguimiento y consolidación del negocio.
En la edición de 2015 Fundación ONCE ha aprobado 101 proyectos de autoempleo, cuya dotación inicial, incluida la aportación del Fondo Social Europeo, ascendió a un total de 801.650 euros. La directora de formación y empleo de la Fundación ONCE destaca el alto grado de innovación que presentan los proyectos de este año, entre los que destacan, por ejemplo, una consultoría de cartografía que emplea drones y otras tecnologías o una plataforma de subastas de productos de moda de alta gama. Además, la fundación también ha comenzado a detectar nuevos proyectos con un marcado carácter social, como el de una empresa de comercialización de vinos solidarios, que pone en el mercado productos de alta gama con un reetiquetado y que destina parte de sus ingresos a acciones sociales.
Los 101 proyectos de esta edición tienen al frente a 50 hombres y a 45 mujeres, una casi paridad que, sin embargo, no es la norma. Según un estudio presentado recientemente por la ONCE, en el que se analizan los emprendimientos desarrollados entre 2008 y 2014, la tasa de mujeres dentro del colectivo de emprendedores es del 36%, “todavía relativamente baja”, reconoce Lobato, “ahí tenemos que ver cómo incidir en favorecer el emprendimiento de mujeres”.
En este estudio también se investiga la tasa de supervivencia de los negocios emprendidos, que se sitúa en un 71%. “Es una tasa muy alta, tres de cada cuatro iniciativas sobreviven”, enfatiza la directiva de Fundación ONCE. Más si se tiene en cuenta, como ella misma recuerda, que según las estadísticas de demografía empresarial del INE, de los emprendimientos que arrancaron en 2009, a los tres años sobrevivieron un 54%. “Teníamos intuición de que era así pero ahora tenemos el tema contrastado”.
Más empleo
El 40% de los emprendimientos que apoya la Fundación ONCE crea empleo, con una media de tres empleos por emprendimiento, según un estudio realizado por la ONCE. “También nuestro interés no es solo que arranque el emprendimiento para que esa persona se procure un medio de vida por cuenta propia, sino apoyar su negocio porque si crece va a contratar a otras personas, y es bastante probable que sean personas con discapacidad”, explica Sabina Lobato, directora de empleo y formación de la Fundación ONCE.
La tasa de empleo por cuenta propia dentro de las personas con discapacidad es del 11,6%,cuando en la población general es del 17,7%.