El plan de Colonial para recuperar la senda del crecimiento
La inmobiliaria anuncia un plan de inversiones de 1.500 millones en adquisiciones en los próximos cinco años
En la jornada Colonial Investors Day, donde la inmobiliaria reúne a analistas e inversores, el consejero delegado, Pere Viñolas, anunció que la compañía prevé invertir un total de 1.500 millones de euros en comprar nuevos activos inmobiliarios para incorporar a su cartera patrimonial durante los próximos cinco años, en el periodo 2015-2019.
La empresa ya tiene actualmente un ritmo de inversión de alrededor de 300 millones de euros, pero el consejero delegado confirmó que en el próximo lustro apostarán por seguir comprando como mínimo a ese nivel nuevos edificios, fundamentalmente de oficinas. De esos 1.500 millones, alrededor del 40% de los fondos provendrán de deuda.
El papel de Villar Mir
Villar Mir entró en Colonial en 2014, controlando un 25% de la sociedad y convirtiéndose en accionista de referencia. El pasado mes, redujo su participación en un 10%. Esta operación le permitió embolsarse 178,6 millones para afrontar la ampliación de capital en OHL. Aun así, sigue siendo el principal accionista.
De hecho, el consejero delegado también habló de la deuda de la empresa, ya que en mayo cerró con éxito una emisión de bonos de 1.250 millones, para amortizar anticipadamente el crédito sindicado que tenía la compañía por importe de alrededor 1.040 millones. Actualmente la deuda consolidada es de 2.700 millones. Además, la inmobiliaria solicitó calificación crediticia, otorgado el rating de BBB- por Standard and Poor’s.
Madrid, Barcelona, París
La inmobiliaria, que está participada por Grupo Villar Mir, reconoce en un documento –que sirvió de presentación para los inversores– que ya está analizando posibles adquisiciones por valor de unos 1.000 millones. La firma catalana enmarca estas inversiones en su nueva estrategia de crecimiento. Madrid, Barcelona y París siguen siendo los principales en la nueva política de expansión que, no obstante, estudia otras ubicaciones para comprar inmuebles.
El principal accionista de Colonial, con el 15% del capital, sigue siendo el grupo Villar Mir, a pesar de que recientemente vendió títulos para inyectar fondos en la ampliación de la constructora OHL. El resto de accionistas son Qatar Investment Authority, con un 13%, el grupo colombiano Santo Domingo y Amura capital (sicav de MoraBanc), con un 7% respectivamente.
De la inversión total prevista, la compañía que preside Juan José Brugera ha ejecutado ya durante este año compras de edificios, todos ellos en España y Francia, por un importe de 405 millones. En concreto, se ha hecho con tres inmuebles de Madrid, uno de Barcelona y dos más en París, en este último caso a través de su filial francesa SFL. A cierre de la primera mitad del año, Colonial contaba con una cartera patrimonial valorada en unos 6.400 millones de euros, integrada por edificios de oficinas ubicados en los centros de Madrid, Barcelona y París, que suman unos 758.000 metros cuadrados de superficie. Su valoración bursátil ronda los 2.100 millones.
Apuesta por la mejoría en España
Colonial fue fundada en 1946 por el entonces Banco Hispano Colonial. En los noventa, La Caixa fue el accionista de referencia y quien colocó en Bolsa a la compañía en 1999. En 2004, desembarcó en el mercado francés, a través de Société Foncière Lyonnaise (SFL), de la que controla el 53% y que en 2014 tuvo 150 millones de ingresos.
La compañía estuvo en números rojos en 2012, con pérdidas de 1.129 millones, y en 2013 (546 millones), con datos ofrecidos por Bloomberg. En 2014, Grupo Villar Mir entró en el capital con una inyección de 300 millones de euros. Desde entonces, ha sido el accionista de referencia con un paquete minoritario.
Colonial no solo prevé crecer mediante compras, sino también optimizando sus actuales contratos, según apunta la compañía, fundamentalmente debido a las mejores condiciones en la economía española, que previsiblemente se trasladará al crecimiento de las empresas y al negocio de alquiler de oficinas.
El negocio de esta inmobiliaria, precisamente, pasa por el alquiler de oficinas, normalmente situadas en los mejores distritos financieros de Madrid, Barcelona y París. Colonial calcula que puede mejorar en casi 100 millones (concretamente 91 millones) sus ingresos por rentas, de forma que sobrepasen la cota de los 300 millones de euros (hasta alcanzar unos 320 millones en los próximos años), frente a los 229 millones actuales