Las cajas inician los contactos con Ordóñez para emitir 'cocos'
Necesitan capital para las provisiones y los test de estrés
Los bancos pertenecientes a las cajas estudian instrumentos financieros que les permita recapitalizarse para hacer frente a las previsibles nuevas exigencias de provisiones que impondrá el Gobierno y para cumplir con holgura los próximos test de estrés que realizará la Autoridad Bancaria Europea, previsiblemente a mitad de 2012. Los bonos convertibles contingentes, conocidos como cocos, son una de las principales nuevas vías que exploran con Banco de España y CNMV.
El proyecto del Gobierno de pedir más provisiones por los activos inmobiliarios en poder de la banca, como consecuencia sobre todo de los descuentos que pretende aplicar en su valoración y que estarán cercanos a un 20%, unido al parón del negocio financiero que se prevé y a los nuevos exámenes europeos de solvencia, pueden provocar un cúmulo de pérdidas para un gran número de entidades que ya ha comenzado a tener sus efectos.
Varias entidades han contactado con el Banco de España y la CNMV para estudiar nuevas vías de recapitalización, y más en concreto, los convertibles contingentes. Estos híbridos -inicialmente son deuda pero pasan a ser capital de máxima categoría al convertirse en acciones- son uno de los instrumentos que quieren emplear para mejorar su solvencia una vez que la Autoridad Bancaria Europea (ABE) lo admite como core capital. La banca comienza a considerarlos una alternativa frente a los convertibles españoles.
Los cocos son similares, pero pasan obligatoriamente a convertirse en capital si se cumple la contingencia o supuesto al que están condicionados, por ejemplo que el core capital de la entidad baje del 7% o que la cotización bursátil alcance determinado nivel. La ABE, además, los admite para llegar al 9% de core capital, a diferencia de otros convertibles.
El problema de este instrumento, explican fuentes cercanas al supervisor es que, de momento, solo podrían contabilizar en los test de estrés de la ABE, entre otras razones porque aún está pendiente de que se apruebe una directiva en la UE sobre lo que se tendrían en cuenta como contingencias. Y ello llevaría consigo también adaptaciones en la norma española. Varios directivos bancarios aseguran que los cocos pueden ser más atractivos que las convertibles para un inversor, pero quedan flecos por aclarar.